Mieres tendrá un nuevo cuartel en el año 2019. Así lo afirmaron ayer tanto el delegado del gobierno en Asturias, Gabino de Lorenzo, como el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, tras visitar las obras de demolición del viejo inmueble. Ambos confirmaron que el Ministerio del Interior ha consignado una partida plurianual que asciende a más de 7 millones de euros para el equipamiento, cuya obra física comenzaría el próximo año 2017.

La inversión prevista y programada por el Ministerio del Interior recoge para Asturias más de 9 millones de euros, de los que el grueso serán para el acuartelamiento de Mieres. Según detalló Arsenio Fernández de Mesa, en el presente 2016 se ha reservado una partida de 315.000 euros, que se empleará en ajustar el proyecto a las normativas energéticas y de accesibilidad vigentes. Para el próximo año, 2017, se destinarán 1,8 millones de euros. En ese ejercicio está previsto que comience la obra civil para levantar el nuevo acuartelamiento.

El año de mayor gasto será 2018, para el que se incluye una partida de 4,1 millones de euros para continuar los trabajos de construcción, que pasarían por levantar toda la estructura del cuartel. Por último, en 2019, la obra tendría un coste de 1,38 millones de euros para rematar los trabajos e inaugurar ya el edificio. Los plazos que ayer detalló el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, pasarían porque a mediados del presente año, "en junio o julio", el Gobierno proceda a la licitación del proyecto.

El delegado del Gobierno, Gabino de Lorenzo aseguró que "para construir un nuevo cuartel se necesitan tres cosas: terrenos, proyecto y fondos", y detalló que Mieres tiene todo los imprescindible. Además, partiendo de la premisa de que "lo que no está en los presupuestos no existe", De Lorenzo apuntó que el acuartelamiento de Mieres "está presupuestado en 6 millones y hay que entender que la financiación está garantizada". Por último, quiso agradecer a Aníbal Vázquez su mediación con los vecinos para que "gracias a una negociación, que no una imposición, todos hayan cedido y se haya llegado a un acuerdo sobre el proyecto de 2008".

Fernández de Mesa, por su parte, también ensalzó la coordinación entres las administraciones local, regional y general del Estado "independientemente del color político" para hacer realidad el cuartel, "que no era cuestión sencilla". Cuestionado sobre si un cambio de Gobierno podría dar al traste con el proyecto, el responsable del instituto armado aseguró que "lo que visto en toda España es que la Guardia Civil es querida por todos los partidos políticos y ha estado al servicio de todos los ciudadanos, del orden y de la ley, independientemente del Gobierno". Por ello, prosiguió "la Guardia Civil es necesaria y va a seguir contando con el apoyo de todos los partidos con sentido común".

El Alcalde de Mieres, Aníbal Vázquez, aseguró que la presencia en Mieres del Director General de la Benemérita suponía "un espaldarazo al proyecto para que el cuartel sea una realidad en un tiempo ya determinado". Además, aseguró que en ningún momento se puso en duda la necesidad de un cuartel en Mieres, y que toda la polémica generada con los vecinos venía por su ubicación. Por último, aseguró que tuvo muchas dudas sobre la ejecución del proyecto al no estar especificado en el presupuesto, pero aseguró que la presencia del responsable de la Guardia Civil en Mieres "nos tiene que satisfacer a todos y confiemos que en el menor tiempo posible tengamos aquí el cuartel".