Pola de Siero,

Manuel NOVAL MORO

«La salud no está en la farmacia, sino en las posibilidades que tiene la gente para moverse, comer bien, disfrutar de la igualdad social y la equidad». Con esta sentencia, Valentín Pérez, director del centro de salud de La Fresneda y promotor del proyecto «Fresneda» -una iniciativa destinada a mejorar la salud de los vecinos-, dejaba claro ayer que la prevención es el mejor vehículo de garantía de la salud. Con esta premisa, el centro organizó ayer la fiesta de la salud de La Fresneda, una iniciativa cargada de actividades que contó con el apoyo del Principado y de la asociación Participa.

La plaza Mayor acogió la mayoría de las actividades, destinadas a niños y mayores y encaminadas a que todo el mundo conociera las propuestas saludables que tiene a su alcance y los recursos que ponen a disposición de la salud de las personas los grupos, las asociaciones o los servicios públicos, así como el acceso a espacios naturales.

Los niños y los mayores que participaron fueron protagonistas de varios juegos encaminados a potenciar una mentalidad sana, como el diseño de un mapa de La Fresneda y sus recursos pintado en el suelo, una competición de abrazos o un juego de primeros auxilios.

Además, probaron actividades cuyas excelencias están más que demostradas como el yoga, el taichi, los masajes, las manualidades, los bailes del mundo, los bailes de salón, el fitness o el cultivo de huertos.

Además, hubo caminatas de marcado carácter reivindicativo, como la desarrollada en Pruvia para pedir más recursos deportivos o en La Fresneda pueblo para solicitar la tan esperada senda peatonal. La jornada, desarrollada a lo largo de la tarde, pretendía ser un impulso, un trampolín desde el que niños y mayores se animen a llevar una vida más saludable.

Esta filosofía está perfectamente recogida en el proyecto «Fresneda», que, según su impulsor, cuenta ya con más de 500 usuarios y 20 actividades funcionando, entre ellas talleres para dejar de fumar, apoyo psicosocial, apoyo para la lactancia o guía para una buena alimentación.

Próximamente, comenzará el desarrollo de los huertos públicos en una finca contigua al centro de salud. La actividad está ya aprobada, pero falta que en las próximas semanas les envíen sesenta camiones de tierra procedente de las obras del polígono de Bobes para poder comenzar los trabajos.

Otra propuesta que está a punto de ponerse en marcha es la recomendación a restaurantes de la zona para que hagan menús saludables. El proyecto cumple dos años en septiembre, cuenta con 43 voluntarios para todas las actividades y tiene una gran acogida en internet. Por ejemplo, ha tenido más de 200.000 visitas en su cuenta de Facebook y también la de Twitter está «muy bien posicionada», en palabras de Pérez. Asimismo, los tres principales congresos médicos, de enfermos crónicos, de medicina familiar comunitaria y de salud pública, han invitado a los responsables del proyecto, lo que es un síntoma de que despierta mucho interés.