Grado,

Lorena VALDÉS

Una simple piedra puede esconder mucha historia detrás. Es el caso de la que se encontró, durante un paseo por las obras de remodelación del paseo del río de Grado en el año 2003, el moscón Emilio Argüelles. La piedra, de gran volumen, pertenecía al chalé de Valentín Sarasola «Tumballobos», desaparecido a causa de la riada que anegó la villa moscona y sus alrededores y provocó el fallecimiento de una mujer en la víspera de San Mateo de 1921. La piedra será convertida ahora en monumento, por iniciativa de la concejalía de Cultura y del Círculo de Estudios Pramarenses, del que es miembro Argüelles, con motivo del 90 aniversario de esta efeméride que conmocionó al pueblo moscón.

La noche del 20 al 21 de septiembre de 1921 el río Martín se volvió loco. Este pequeño riachuelo, por el que apenas baja agua durante el verano, se convirtió en un gran torrente que arrastró todo lo que encontró por delante. La fuerza de las aguas fue tal que provocó el hundimiento de varias casas, una de ellas el popular chalé de Valentín Sarasola «Tumballobos», ubicado en la zona de las Calles Nuevas.

Durante la presentación del molito conmemorativo, la concejala de Cultura, Victoria Fernández (Aigras), destacó que «la prensa regional y nacional se hizo eco de los sucesos de Grado y se creó una Junta de Socorro, abanderada por el Marqués de laVega de Anzo, el abuelo de la actual propietaria del título, Pilar González delValle, para recaudar fondos a beneficio de los damnificados por la inundación».

Además, la edil de Cultura acudió a la hemeroteca para rememorar que «en noviembre de ese mismo año, 1921, el Ministerio de la Gobernación concedió a la villa el título de Siempre benéfica, firmado por el rey Alfonso XIII, y a su Ayuntamiento el tratamiento de Ilustrísimo, todo ello como atención por la desgracia sufrida por los habitantes de Grado».

Casi un siglo después, Grado conmemorará la trágica riada con la colocación de esta histórica piedra, restaurada de forma altruista por José Luis Argüelles, estudioso de la figura de Valentín Sarasola, en las inmediaciones del paseo del río Martín, cerca de la ubicación original del chalé «Tumballobos».