Villaviciosa, G. BENGOA
«Villaviciosa prepara su Semana Santa con llamadas a la profundidad religiosa». Lo dijo ayer el escritor maliayés Etelvino González, presidente de la asociación cultural Cubera, en el pregón de la Semana Santa de Villaviciosa, que tuvo lugar en el teatro Riera. Partiendo del cartel anunciador de este año, González hizo una reflexión de gran contenido en la que se refirió a «los flagelos del mundo actual, como la hambruna o la violencia», sin dejar de evocar recuerdos y vivencias de su infancia. También caracterizó las celebraciones locales en función del escenario de la Villa.
El cartel que anuncia la Semana Santa de Villaviciosa es obra del pintor maliayés Luis Mahamud Iglesias y representa el paso de la flagelación, obra de Galarza Moreno (1948). El pregonero calificó la obra como «el primer pregón de este año». La Cofradía de Jesús Nazareno quiso que este año fuera el citado pasaje «el centro de nuestras consideraciones», dijo González, lo que considera «un acierto más que añadir a las iniciativas de una junta que se caracteriza por la creatividad, el tesón y el decoro con que mantiene nuestras celebraciones seculares».
El presidente de Cubera señaló que de la Semana Santa «todo ha sido glosado, pintado y esculpido, cantado y representado por todo el mundo», pero que la de Villaviciosa «es la nuestra, la que se ha ido fraguando en más de tres siglos». «La Pasión es una devoción muy arraigada en nuestro concejo», aseguró González, quien resaltó que «con su estilo adusto y con la afluencia de todos, tiene personalidad propia y a ella se refieren y miraron siempre los pueblos de Villaviciosa».
También cree importante «trascender el discurso esteticista, sentimental, tipo "Villaviciosa, hermosa" para atender a este tiempo y sus circunstancias, con mirada de profundidad». Además, habló de su infancia en la Semana Santa de Villaviciosa, entre varios recuerdos.
