Ya decía su autor, Eladio Verde, que la obra es un auténtico «disparate cómico». Ayer el público del Teatro Prendes le dio la razón en forma de risas y aplausos. El grupo «Refaxu», de San Martín del Rey Aurelio e integrado exclusivamente por mujeres, volvió a pisar escenario candasín con la obra «Los chiflaos», después de un 2012 de sequía en la que la agrupación teatral sólo se dejó ver por Candás en forma de exposición, con el vestuario y los decorados de su trayectoria profesional. Por eso, su reaparición detrás del telón fue de lo más esperado en el segundo día de espectáculos del XXIII Salón de teatro costumbrista asturiano, patrocinado por LA NUEVA ESPAÑA. Y «Refaxu» no defraudó.

Puso en escena una obra en tres actos en la que combinó la interpretación con pequeñas secuencias de cantos, que cautivaron de inmediato al público candasín rendido a los pies de papeles como el de «Blas», encarnado por una extraordinaria Pili Barreñada, ganadora ya en 2006 del premio «Aurora Sánchez» a la mejor actriz, o de «Magaya», con Isabel Coto. Ambos fueron protagonistas de una función que habla de amor y desamor, también de venganzas, pero con un punto disparatadamente cómico, en el que también tuvieron mucho que ver «Careta» (Manuela Mier), «Pepa» (Finita Fernández) y «Galipu» (Olvi Coto).

Todos ellos participaron en un espectáculo que fue más allá del aspecto cómico y demostró que el amor puede con todo, incluso con el dinero. Por eso, no es de extrañar que en la noche del jueves, las mujeres de San Martín del Rey Aurelio, dirigidas por Aurora Suárez, recibieran el calor de un público que sregaló aplausos por doquier a las actrices, que encandilaron también con un original final en el que no faltaron los cánticos de Orfelina Alonso y Pili Barreñada. Todo ello en un llamativo decorado, conformado por dos caserías y un «chigre».