La familia Vázquez Prendes no se reunirá con el Ayuntamiento hasta que no se reabra el diálogo que "ellos mismos cortaron cuando no contestaron a nuestros requerimientos y alegaciones", en palabras de los propios afectados. Se refieren en primer lugar al escrito de alegaciones que hicieron cuando se les denegó licencia de obras para realizar la limpieza de los restos del argayo que ha provocado la clausura de la casa y del paseo marítimo, según el Ayuntamiento por falta de proyecto técnico, y el posterior requerimiento para que fuese el propio municipio el que realizase las obras.

Durante el día de ayer, cuarto desde que comenzase el encierro en una vivienda sobre la que pesa un riesgo de desprendimientos, se produjeron varios movimientos para tratar de buscar una solución dialogada. El principal de ellos surgió a iniciativa de Izquierda Unida, que ofreció un encuentro entre las partes, gobierno y familia, para tratar de solventar el problema con "diálogo", según aclararon fuentes de la coalición, máxime teniendo en cuenta que "ahora mismo se encuentran encerrados en una casa que no es segura, donde están en peligro, y eso tiene que primar".

Sin embargo, la familia no considera que deban ser ellos quienes recuperen esa vía. "El diálogo lo cortaron ellos, cuando dejaron de contestar, y para que las cosas puedan volver a su cauce deberían respondernos a nuestras cartas", señalaba ayer Alicia Prendes.

Los intentos de mantener una conversación de la familia con el gobierno vienen de "muy atrás", como señalan. Recuerda Prendes que en el año 2010 se había informado al Ayuntamiento de la peligrosidad del monte, sin que nada se hiciera al respecto. "Presentamos un escrito solicitando la intervención municipal ante el riesgo de derrumbe de las tierras del monte, y con ello el riesgo que suponía para los bienes públicos, no solo nuestra casa, como es el caso del paseo y la carretera, tal y como finalmente ha ocurrido", lamenta.

La respuesta del Ayuntamiento a esa petición fue que "a falta de un estudio técnico específico sobre la estabilidad del monte no se aprecia riesgo inminente para la casa, y no afecta directamente a la vía pública, por lo que es un asunto de ámbito privado y dentro de éste debe resolverse". Mientras, los vecinos se concentrarán hoy a las siete frente a la vivienda, en apoyo a la familia.