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Los pantalanes del puerto local siguen sin reparar un año después del temporal

Los candasinos, satisfechos con el dragado, critican que el inicio de las obras se retrasase hasta septiembre

Los pantalanes dañados, ayer, aún sin reparar. M. G. SALAS

Los pantalanes del puerto de Candás no han sido reparados casi un año después del temporal, que en febrero de 2014 destrozó diecisiete barcos locales. Aunque las obras avanzan a buen ritmo -la previsión es que finalicen el mes que viene-, los propietarios de lanchas de recreo señalan que los trabajos debieron comenzar en primavera y no en septiembre, como así sucedió. Ahora las actuaciones en el muelle continúan, ya que el Principado acordó no sólo sustituir los pantalanes dañados, sino también dragar la dársena exterior e interior de forma más profunda que en años anteriores. "Eso era fundamental; hacía mucha falta y se está haciendo bien", asegura Daniel Fernández, presidente del Club Náutico Cuatro Vientos, con unas 200 embarcaciones en la actualidad.

Fernández defiende además que la línea de trabajo seguida por la consejería de Fomento, Ordenación del territorio y Medio Ambiente es "la lógica", aunque lamenta también que las obras no hubiesen empezado antes. "Lo que no tenía sentido es que reparasen los pantalanes y no dragasen debajo cuando en esa zona se acumula mucha arena", explica. De hecho, opina que los daños que causó el temporal del año pasado se debieron precisamente a la falta de calado en el puerto.

Las labores ya concluyeron en la dársena interior, pero no en la exterior. Tras el parón vacacional, en los próximos días una draga tendrá que volver a actuar en la zona, procediendo así a la sustitución de los pantalanes que se encuentren en mal estado. Las estructuras más afectadas están próximas a la bocana y a ellas prácticamente no hay amarrada ninguna lancha.

Los trabajos que sí han finalizado, por contra, son los que afectan a la marina seca. Esta estructura tiene una extensión de 2.200 metros cuadrados, de los cuales 1.000 han sido destinados a zona de varada y el resto a un vial y un aparcamiento. El recinto, que está vallado y dotado de servicios de agua y electricidad, comenzará a funcionar a mediados de este mes. "Nosotros calculamos que para la semana del 15 ya lo ordenemos todo y pasemos los barcos", comenta Daniel Fernández, que opina que la obra era "muy necesaria. Casi todos los puertos tenían una y nosotros no", agrega.

A pesar de ello, el Club Náutico Cuatro Vientos sigue demandando mejoras en el puerto local. Una de ellas, ya vieja y en la que están de acuerdo todos los pescadores, es la modificación de la bocana. El proyecto que manejan sería alargar más el muelle mediante la colocación de bloques y cerrar el espigón de la playa Palmera. Así se conseguiría que la marea no entrase de forma tan violenta cuando hay mucho oleaje, como pasó en el temporal de febrero.

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