La licenciada en Filología Inglesa por la Universidad de Oviedo, natural de Carreño pero afincada en Londres, Pilar Alcorta, ofreció ayer un entretenido pregón de las fiestas del Cristo de Candás en el que recordó las vivencias de su infancia y juventud en el concejo y aprovechó para reivindicar el potencial asturiano, apoyándose en su experiencia personal en Inglaterra.

Alcorta rememoró sus primeros años de vida en Piedeloro, donde sus recuerdos más nítidos son la preparación de los brazos de gitana, el sonido de la gaita y el tambor y sobre todo el repicar de las campanas por su abuelo Manolo en Santa María, mientras que de su etapa escolar y adolescente, ya en Candás, se queda con "la pandilla de esos años, que inspirada por Bolín salía en las charangas".

En la segunda parte de su intervención se centró en la llamada "Asturias Exterior", que Alcorta bautizó como "asturianos ximielgaos por el mundo". A este respecto recordó que hay 694 carreñenses (330 varones y 364 mujeres) que actualmente viven fuera del concejo. "Estos carreñenses llevamos nuestra tierra y gente con nosotros", explicó.

Del mismo modo, señaló que los asturianos son "embajadores no oficiales" y que manejan "informalmente una compañía de exportación e importación", además destacar más virtudes. "Somos profesionales hasta la médula y muy flexibles", dijo para luego puntualizar que los emigrantes del Principado "tiran por la calle del medio" de dos extremos, como son la asimilación u olvido de la raíces para una total integración y los que deciden formar una isla con los suyos en el país de acogida. "Esta postura es de miras cortas y suele conducir al rechazo y resentimiento de los otros ciudadanos, además de provocar actitudes racistas", manifestó la filóloga.