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El chorizo, un videojuego en Candás

Los alumnos del colegio San Félix diseñarán en un taller de robots sus propios mandos a distancia con rodajas de embutido, salchichas o trozos de plastilina

Alumnos de la clase de quinto curso del colegio San Félix de Candás, enseñando ayer sus robots. MEY SERRANO

¿Es posible que unas rodajas de chorizo hagan la función de botones de un mando para jugar a un videojuego? Pues sí. Y así se lo proponen en el colegio San Félix de Candás, donde los alumnos disfrutaron de lo lindo en un taller de robótica en el que la tecnología superó los límites de la imaginación. Unas salchichas o unos simples trozos de plastilina permitirán a los escolares diseñar su propio teclado para jugar a los videojuegos.

"Es estupendo ver cómo los niños aprenden divirtiéndose. Tienen instinto digital, en cuanto se les explica algo lo cogen a la primera y son capaces de desarrollarlo a una velocidad increíble. Les encanta todo este mundo y en cuanto les hablas de robots, videojuegos y 3D, se les cambia la cara", explicó la profesora Nieves Tomé.

Los robots han invadido las clases del colegio candasín durante una semana. La empresa Robotix ha sido la encargada de llevar estos muñecos hechos con piezas de lego a las manos de los alumnos.

"¡Hemos ganado, mi robot ha ganado!", gritó entusiasmado Enol Suárez tras la competición entre los muñecos creados por los alumnos de quinto de primaria. En junio, estos escolares consiguieron llevarse la copa de Lego en el campeonato de Robotix con una "criatura" que, a través de un satélite, se mueve hasta un punto y luego vuelve otra vez a su sitio.

Éste es el segundo año que el colegio San Félix de Candás cuenta con clases sobre las nuevas tecnologías. La asociación de padres y madres decidió incluir entre las actividades extraescolares la robótica, por lo que durante todos los lunes y martes de cada mes los alumnos se reúnen en las aulas aprenden de este mundo durante cuatro horas.

"Durante dos días al mes los llevamos a Laboral, en Gijón, para que se formen en el ámbito del lenguaje de programación. Después son los propios alumnos los encargados de explicarles a sus compañeros lo que han aprendido. Es una maravilla ver cómo trabajan en grupo, se ayudan mutuamente. Aunque ellos no lo noten, aprenden materias como Matemáticas, Lengua o Ciencias Naturales, a través de la creación de videojuegos", asegura Nieves Tomé.

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