La directora general de Servicios Sociales de Proximidad, Lina Menéndez, eludió todo tipo de responsabilidad de la Consejería de Servicios y Derechos Sociales en el conflicto laboral que mantiene sin personal de seguridad el centro de menores Miraflores de Noreña desde el pasado 23 de octubre, tras el inicio de una huelga indefinida iniciada por los guardias del equipamiento.

Menéndez, que ayer visitó el centro, una hora más tarde de lo en principio previsto, con la directora del recientemente recuperado Instituto de Atención a la Infancia, Ana Farpón, negó que su visita se debiera a los problemas del centro y eludió hacer declaraciones acerca de la ausencia de seguridad en el mismo. "Es una cuestión que atañe a Presidencia", señaló Menéndez, que mostró su preocupación por que la repercusión mediática de la huelga afecte negativamente a los menores.

Esta visita tuvo lugar poco después de otra realizada por el Fiscal Decano Delegado de Menores de Asturias, Jorge Fernández Caldevilla, que según fuentes próximas al centro se desplazó hasta Noreña para conocer la situación actual del mismo, después de que varios educadores denunciaran la situación de desprotección en la que desempeñan sus labores.

Por su parte, los huelguistas continúan realizando turnos en las inmediaciones del centro para vigilar que sus funciones no sean cubiertas por otros profesionales. Algo que sería ilegal, pues el hecho de que los diez guardias del centro formen parte del comité de huelga impide que se pueda realizar ningún tipo de servicio mínimo ni sustitución. Asimismo, los trabajadores, que cada jornada reciben el apoyo de guardias de otros edificios públicos y privados de la región, tienen convocada para el jueves una concentración frente a las dependencias de la Consejería de Presidencia en Oviedo y tienen solicitada una reunión con el consejero Guillermo Martínez, que ya habría manifestado su deseo de reunirse con los empleados a la alcaldesa de Noreña, Amparo Antuña, pero todavía no se fijó fecha para el encuentro.