"La vida de Gertrudis Gómez de Avellaneda merece una película". Lo aseguró ayer la académica cubana Luisa Campuzano durante el desarrollo de una conferencia en el centro polivalente de La Baragaña de Candás sobre la literatura latinoamericana del siglo XVIII al XXI. Campuzano glosó con mimo la trayectoria profesional de la escritora cubana y precursora del feminismo en nuestro país, Gertrudis Gómez de Avellaneda, con el objetivo de demostrar los lazos que siempre unieron a la literatura sudamericana y española.

Para Campuzano la vida de Avellaneda fue de una "intensidad tremenda", que rompió barreras sociales. Se casó varias veces, reivindicó el papel de la mujer en la sociedad, denunció la esclavitud a través de sus obras y murió con tan sólo 59 años a causa de una diabetes. "Es uno de los personajes más importantes del siglo XIX y quizá uno de los más destacados de la literatura española de todos los tiempos. Por la cantidad de obras que escribió y la multitud de géneros que cultivó", dijo Campuzano. De hecho, sus novelas siguen siendo estudiadas todavía hoy en medio mundo.

La fundadora del Programa de Estudios de la Mujer de la Casa de las Américas destacó un dato relevante de la biografía de Avellaneda y es que la escritora borró en los últimos años de su vida dos de los rasgos que más le caracterizaban: el feminismo y el ateísmo. "Se puede decir que sucumbió al qué dirán", concluyó.