Un profesor de Candás logra completar las seis grandes maratones del mundo

El 21 de abril de 2024 será una fecha que nunca olvidará Javier Olea. Este gijonés, profesor de Lengua Castellana y Literatura en el instituto de Candás desde hace once años, logró ese día entrar en el círculo de quienes completan las seis mejores maratones del mundo (Nueva York, Berlín, Boston, Chicago, Tokyo y Londres). Un reto nada sencillo que le ha llevado, con numerosas lesiones de por medio, casi una década y que completó tras superar la prueba en la capital inglesa. "No vas con intención de ganar ni de quedar entre los primeros, simplemente intentas terminar", explica.

La maratón de Londres no fue nada sencilla para el asturiano, que ha arrastrado importantes problemas musculares. "Comencé a buen ritmo, pero cuando llevaba la mitad empezaron los dolores. Hice los últimos quince kilómetros con contracturas en ambas piernas, pero intentando siempre mantener el ritmo", cuenta. El esfuerzo mereció la pena y cruzó la meta firmando un tiempo de tres horas y dos minutos. "Llevaba años sin acercarme a eso", reconoce.

Olea comenzó con los grandes maratones hace ya una década, durante su etapa como docente en Lanzarote. Fue en 2013 cuando le surgió la oportunidad de correr el de Nueva York. "Tenía mucha ilusión. Nunca había estado en Estados Unidos y fue espectacular", recuerda. El gijonés pidió una semana de semana de permiso en el trabajo para "disfrutar a tope de la experiencia".

Por aquel entonces, tenía 36 años y logró firmar un tiempo de 2 horas y 57 minutos, quedando el 507 de todos los participantes. Al año siguiente llegó la de Berlín, que completó en 2 horas y 55 minutos. En 2019 decidió retomar el reto y disputar la maratón de Chicago tras una lesión en el tendón de aquiles "Terminé en tres horas y cinco minutos", indica. Animado por su familia, decidió lanzarse a la prueba de Boston, completada en 2022. "Luego, en Tokio tuve bastantes problemas durante la preparación y el llegar hasta allí fue una odisea, pero al final la carrera salió más o menos bien. Mi única misión era terminarla, aunque notaba pesadez en las piernas", sostiene el corredor, ya en posesión de la medalla acreditativa de que ha logrado concluir los seis grandes maratones.