Parte de la responsabilidad de los buenos datos registrados por el transporte público en Lugones se debe atribuir a los vecinos de La Fresneda. Un núcleo, distante apenas un kilómetro de Lugones, cuya población supera las 4.000 personas, pero que no cuenta con apeadero de ferrocarril y tiene, a juicio de los residentes, pocas alternativas de transporte público.

"Para nosotros lo ideal sería estar incluidos en la misma línea de autobús urbano de Oviedo que Lugones, porque hay mucha gente de aquí que estudia o trabaja en Oviedo y que podría beneficiarse de ese servicio", explica Óscar Llamas, presidente de la Asociación de Vecinos de La Fresneda. Aunque la localidad cuenta con una línea de autobús que la conecta con la capital, Llamas explica que no tiene una frecuencia de viajes como la que puede tener el urbano, lo que hace que muchos vecinos se decanten por otros medios de transporte.