La empresa Aqualia Gestión Integral del Agua, S.A. ha presentado una demanda ante el Juzgado de lo contencioso-administrativo en la que solicita la resolución del contrato que la vincula a la gestión de la piscina del complejo deportivo Santi Cazorla, y además pide por ello una indemnización de 4.706.394,88 euros, de los que 4.130.000 euros corresponderían a la construcción de la instalación.

La empresa había presentado la solicitud de la rescisión y la consiguiente indemnización por vía administrativa, con el argumento del "desequilibrio económico" que hace inviable prestar el servicio. Lo hicieron antes de las últimas elecciones, cuando gobernaba en el municipio el PP, encabezado por José Avelino Sánchez.

El Ayuntamiento de Llanera le denegó, por silencio administrativo, esta reclamación, y ahora la empresa ha recurrido ante los tribunales para tratar de conseguir su propósito.

El alcalde de Llanera, Gerardo Sanz, ha incluido en el orden del día de la sesión plenaria ordinaria que se celebra mañana la contratación del bufete de abogados de Gerardo de la Iglesia y Miguel Teijelo. Según asegura Sanz, él tenía plena potestad para contratar estos servicios sin tener que pasar por el Pleno, pero ha preferido hacerlo para continuar en la línea de informar y hacer más visibles los movimientos que se hacen en el Ayuntamiento.

El bufete De la Iglesia-Teijelo fue el que defendió los intereses municipales en los últimos litigios entre la empresa concesionaria y el municipio.

Aqualia ha venido reclamando cuantiosas subvenciones al Ayuntamiento de Llanera como compensaciones económicas por no haber alcanzado los ingresos de explotación previstos en la piscina de Lugo.

En todos ellos, los tribunales han dado siempre la razón al Ayuntamiento de Llanera. En el mandato anterior, habían sido los partidos de la oposición, con mayoría en el Pleno -PSOE, IU y Foro- quienes forzaron al municipio a pleitear, y evitaron así que el municipio abonase a la empresa cientos de miles de euros. El gobierno del PP se mostraba, en cambio, a favor de abonar las subvenciones.

Ahora, el tripartito -PSOE, IU y Somos- sigue en la misma línea de no avenirse a subvencionar las pérdidas o la falta de ingresos de la empresa concesionaria, ya que considera que los contratos de concesión no han recogido esta obligación.

El Alcalde señala que, en todos los casos, su idea ha sido "defender los intereses de los vecinos de Llanera; tenemos los ejemplos de dos sentencias, con sus correspondientes recursos, que dicen que no ha lugar a subvencionar a Aqualia, y, por lo tanto, el Ayuntamiento no encuentra ningún motivo por el que la empresa tenga que pedir la rescisión del contrato; no se hizo nada en contra de la empresa, ningún hecho sobrevenido que la pudiera justificar".