Jesús Rodríguez es natural de Collao, trabajador del Ayuntamiento de Siero y tiene 52 años. Tras mucho tiempo dedicándose al fútbol en equipos como el Langreo y llegar a ser cinturón negro en judo, comenzó hace unos años su vinculación con los bolos. Primero jugó en la peña Les Escueles y luego fundó la peña El Berrón en 2011, que desde entonces preside.

-¿Cómo se presenta la temporada?

-Cada sección tiene sus objetivos. Los pequeños generan especial ilusión, las féminas tratarán de seguir progresando y revalidar el título de liga femenina y los grandes está por ver.

-¿Qué objetivo tienen para la Liga?

-El año pasado en segunda partíamos como favoritos para subir, pero perdimos tres de las cuatro primeras partidas. Nos dimos cuenta que no había que meterse presión, sino disfrutar y entender los bolos como una manera de desconectar. Esta filosofía trajo buenos resultados y salimos finalmente campeones. Este año en Primera trataremos de aplicar la misma teoría para mantenernos.

-¿Están contentos con el proyecto de hacer una bolera en Los Campones?

-Por supuesto. Es la culminación de todo lo que peleamos para conseguirlo. Había gente reacia a hacer una bolera nueva, pero cuando lo planteamos como un traslado del material de la descubierta para hacer una cubierta se vio con buenos ojos. Esperamos para el verano poder estrenarla y celebrarlo con todos los amigos.

-¿Es mal momento para los bolos?

-En la vida llegan continuamente encrucijadas. En los bolos estamos ahora en una. Nunca pensé que llegaría a este punto. Hay dudas de quien tomará las riendas de la federación. Yo me ofrezco a colaborar en lo que pueda con los nuevos dirigentes.

-Son una de las canteras más exitosas. ¿Cuál es el secreto?

-Hay que enfocar los bolos como un deporte complementario a otros. Empezamos con mis hijas y algunos amigos y luego fueron sumándose más. Hay que incentivar con apoyos, premios y alicientes.

-¿Se sienten respaldados?

-Por suerte tenemos varios patrocinadores en El Berrón que nos ayudan pese a que ahora jugamos en la Pola hasta tener bolera. A cambio instamos a los 90 socios que tenemos a consumir en el comercio local.