El Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) ha rechazado la demanda formulada por los sindicatos UGT, CC OO y CSI contra el expediente de regulación de empleo (ERE) que condujo al despido de toda la plantilla de Fahime, empresa de bienes de equipo que está sin actividad desde octubre de 2015 y cuyos trabajadores protagonizan un encierro en la fábrica de Tabaza que ya dura casi cuatro meses.

Los representantes de los trabajadores habían reclamado la nulidad del ERE al considerar que el período de consultas no había respetado la normativa vigente, que se había producido fraude por parte de la compañía y en general que ésta no negoció de buena fe con los trabajadores. El TSJA asume los argumentos de la Fahime, representada por el despacho Montoto y Asociados, y entiende que el proceso para el despido colectivo se realizó sin irregularidad y que la situación de pérdidas alegada por la empresa quedó acreditada.

La nulidad hubiera supuesto la obligación de readmitir a los despedidos. Subsidiariamente, la plantilla pedía que se declarara la decisión empresarial no ajustada a derecho, lo que, de ser aceptado, habría dado a los despedidos el derecho a reclamar indemnizaciones mayores. Ambos caminos son denegados por el TSJA, si bien su fallo es recurrible ante el Supremo.

"Es como si nos cayera encima un jarro de agua fría", lamentó ayer Jero Fernández, portavoz de los trabajadores de Fahime sobre el fallo judicial. Los despedidos celebrarán mañana una asamblea en la que decidirán si acuden al Tribunal Supremo. "No sabemos qué ocurrirá con la medida cautelar que impedía vender los activos de la empresa, suponemos que se levantará, aunque no sabemos nada", señaló Fernández tras leer la decisión judicial que los empleados confiaban en que tuviera otro resultado, que el despido fuera declarado nulo. Pese al resultado de la sentencia, los trabajadores despedidos mantendrán su calendario de movilizaciones y seguirán adelante con sus concentraciones como la de ayer frente a la consejería de Industria, en Oviedo. En el acto participaron los tres sindicatos con representación en la fábrica. UGT, CC OO y CSI solicitaron además una reunión con el consejero de Empleo e Industria, Francisco Blanco, que, según sus cálculos será la próxima semana.

El colectivo también ha solicitado un encuentro con cada uno de los grupos políticos en la Junta General del Principado.