Un viaje en el tiempo para conocer los orígenes de una tradición comercial transformada por el tiempo en seña de identidad. Eso es lo que vivió ayer la Pola con motivo del inicio de los festejos de Güevos Pintos, en el que no faltó la original recreación de la entrega de la Carta Puebla, instaurada en los últimos años.

El acto contó con la participación del alcalde de Siero, el socialista Ángel García, que recibió el documento de manos de un Alfonso X interpretado por Pergentino Martínez, al que acompañó, encarnando el papel de reina, María Emilia Rodríguez, mientras que Felipe González ejerció de pregonero para dar lectura al pergamino de 1270 en el que se declaraba la fundación de la capital sierense. "Se celebrará mercado cada martes y a cambio se pagarán 450 maravedís al año", señaló en su ceremoniosa intervención el portavoz real.

Una vez entregada la carta al regidor, este y los reyes iniciaron un paseo por el IV Mercáu Polesu, que permanecerá abierto durante todo el fin de semana con una amplia programación lúdica para todos los públicos y con decenas de puestos que venderán todo tipo de productos asturianos como sidra, queso, embutido.

No obstante, todo apunta a que el recinto más recurrente será de nuevo la carpa de los Güevos Pintos, en la que una treintena de vendedores comenzó ayer a dar salida a numerosas obras de arte ovaladas de todos los tamaños, colores, temas y, sobre todo, precios. "Los hay muy bonitos, pero algunos se me van de presupuesto", declaró la ovetense Marga Iglesias, que se confiesa una incondicional de los festejos polesos.

Otros disfrutaron en grande de los primeros actos festivos, que contaron como protagonistas con los miembros del grupo folclórico "El Ventolín", que no escatimó esfuerzos para deleitar con algunas de sus danzas. "Esta es una fiesta asturiana auténtica y no otras", recalcó la polesa Josefina Menéndez, que se mostró entusiasmada con la abundante participación juvenil del grupo folclórico. "Da gusto ver a chiquillas y chiquillos tan bien organizados y disciplinados", señaló entregada la vecina.