Pasar las vacaciones de manera activa y productiva al mismo tiempo. Eso es lo que hicieron durante esta última semana los alumnos del colegio público Condado de Noreña, con motivo de un taller que tuvo como centro de operaciones el gimnasio del propio centro y reservó alguna de sus actividades más destacadas en la cocina.

La actividad, organizada por la ludoteca "Nunca Jamás" en colaboración con la AMPA del centro, reunió a nada menos que medio centenar de pequeños, que se lo pasaron en grande a la vez que aprendieron a hacer muchas cosas de los quehaceres diarios. El cine, los juegos y los deportes fueron algunas de las actividades habituales que pudieron practicar, pero sin duda las más provechosas fueron otras. "Cocinaron hasta pizza y elaboraron sus propias gominolas", comenta la monitora y promotora de la actividad, Paula Suárez.

A pesar de contar con un solo horno, los pequeños se sumaron a la fiebre infantil por los fogones y a pesar de las dificultades y el esfuerzo para superarlas pudieron, finalmente, sacar pecho. "Hice yo sola todas estas", presume la pequeña Noa Blanco mientras enseña un puñado de gominolas caseras.

Entre los objetivos del taller estuvo también el de descubrir la conocida como cocina creativa, y para ello elaboraron productos que además de imaginación escondían una finalidad de concienciación sobre la alimentación saludable. "Hicimos un erizo con diferentes frutas que tuvo mucho éxito", declaró la propia Suárez, entusiasmada por la gran acogida que tuvo el taller entre las familias noreñenses.

En total fueron cinco jornadas que se desarrollaron entre el lunes y el viernes de esta semana, en un horario comprendido entre las nueve y media de la mañana y las dos y media de la tarde, que también permitió a los padres favorecer la conciliación durante los días de descanso de los pequeños.