El oro verde tiene forma esférica en el mercado semanal de la Pola. Los puestos de los aleros de la plaza cubierta de la capital sierense presentaban como principal reclamo ayer cajas y cajas de guisantes, arbeyos en asturiano, que los compradores buscaban con esmero, pero con una clara intención de regatear los precios.
El hecho de que este producto esté tan demandado en esta época es por el escaso recorrido que tiene su temporada alta. "Es un producto que vendemos un mes o poco más", comenta la vendedora de Caldones, Celsa Villabona, que este año limitó la producción de arbeyos a "un par de riegos en medio de la huerta".
Si bien los guisantes son un alimento que cuenta con una gran reputación, es su elevada cotización la que echa para atrás a muchos clientes a la hora de llevárselos para sus casas. "Actualmente están siendo vendidos a cinco o seis euros el kilo y hay gente que no está dispuesta a pagar tanto pese a que la calidad está garantizada", explica la propia Villabona, consciente de que la situación económica actual no es la mejor para ofertar lo que muchos consideran como la joya primaveral de la huerta asturiana.
El principal interés por esta legumbre radica en su versatilidad para ocupar un papel importante en diversos platos elaborados. "Son ideales para acompañar guisos, paellas u otro tipo de recetas, pero también hay mucha gente que los come solos o con jamón", indica una vendedora que entre sus sugerencias está la de prepararlos con carne, aunque sostiene que "el principal inconveniente es que saben mejor que la propia carne y le quita protagonismo".
Una teoría que es compartida por varias amas de casa que no perdieron la oportunidad de llevarse una buena bolsa para casa. "Todos los años por estas fechas nos reunimos para comer arbeyos con jamón", sostiene una Paquita Iglesias que llegó ayer a la Pola desde Gijón para darse un paseo por el mercado poleso. "Soy aficionada a recorrer los mercados más importantes de Asturias y este es uno que frecuento mucho", apuntó una mujer que también aprovechó para aprovisionarse de unos pimientos y lechugas y que reconoció que combate la limitación de las temporadas con otros medios. "Soy de las que trata de comprar mucho en temporada y congelarlo para aprovecharlo todo el año", indica.
Del mismo modo, también acapararon gran protagonismo en la mañana de ayer las flores y los plantones de determinados árboles y plantas. "Es la mejor fecha para comprar flores y algún que otro árbol frutal", apuntó un Herminio Menéndez, que ayer aprovechó para adquirir geranios que le encargaron unas amigas de La Felguera. "Allí también los tienen, pero los de aquí les gustan especialmente", explicó este comprador ovetense.
