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Los profesionales piden aparcar los debates políticos para no arruinar estas iniciativas

Pese a que hay consenso en torno a los beneficios potenciales de estas celebraciones religiosas, también ha habido cierta controversia en torno a su vinculación con la administración. El último episodio se produjo en Noreña, donde recientemente se aprobó una moción en favor del laicismo que incluye el veto a la participación de los cargos públicos en actos religiosos, incluida la procesión del Ecce-Homo. Para los profesionales del comercio y la hostelería, es conveniente dejar a un lado estas controversias y tratar de aprovechar todas las iniciativas que se hagan en los pueblos. "Todo lo que sea sumar y no restar me parece bueno, mientras no queramos meternos en la vida de los demás", sostiene José Cuévano, mientras Ana José de Celis añade: "Cualquier iniciativa que se haga, sea una procesión u otro tipo de actividades, repercute en el pueblo y puede ser beneficioso".

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