La policía acabó ayer por los suelos en La Fresneda. Tal cual. Pero por gusto y con el fin de enseñar. El "artista de la seguridad vial", el "agente bailongo" o "el trovador de los pasos de peatones". Todas estas etiquetas sirven para referirse a José Vázquez, un policía Local de Oviedo que ha conseguido revolucionar las charlas escolares sobre educación vial por sus peculiares maneras de afrontarlas. Ayer encandiló a los alumnos del colegio público de La Fresneda con unas actuaciones extremadamente divertidas y cuyo mensaje tardarán en olvidar.
Vázquez se dejó el sentido del ridículo en casa y utilizó todos los medios habidos y por haber para captar la atención. No dudó en tirarse al suelo para hacer la cucaracha, entonar diferentes canciones con trasfondo didáctico y coreografías bien diseñadas. Además, se enfrentó a su marioneta particular para dejar claro lo que está bien a la hora de circular por aceras, carreteras y pasos de cebra. La canción de "Lisa, la tortuga" enseñó a los escolares a poner la misma cara graciosa del animal, pero también a mirar a los dos lados para cruzar la carretera. Aprendieron que las imprudencias como salir a la carretera por un balón pueden tener consecuencias peores "que quedarse con la cara de cocodrilo" y tomaron nota para regañar a sus padres cuando incumplen al volante. "Si haces el animal, iremos juntos al hospital", fue un fragmento del tema que todos los niños aprendieron en tiempo récord junto a una peculiar coreografía que realizaron mientras cantaban con el agente.
La experiencia arrancó muchas carcajadas entre los alumnos, dejó boquiabiertas a las profesoras por su efectividad y también dejó satisfecho a un policía que como todo buen artista lleva los espectáculos preparados al pie de la letra.
"Busco una educación más emocional", explica Vázquez, que lleva más de 20 años impartiendo charlas sobre seguridad vial y un día se dio cuenta de que utilizando otros elementos podía hacer calar su mensaje de manera más eficaz. "Uso música porque unifica y también una marioneta porque, aunque les vacile un poco, les gusta", cuenta este experto que incluso adapta su actuación para niños de diferentes edades.
