Cada amanecer de la fiesta de Santa Ana en Grado, José Ángel González Martínez, conocido popularmente como "Plucky", sorprende a los moscones con divertidos disfraces. Una afición que comenzó en 2007 y que ya no puede faltar en la villa moscona. A eso de las ocho de la mañana, tras la larga noche de fiesta y a punto de encarar el desfile del agua, la gente espera con impaciencia la llegada de "Plucky" para disfrutar de sus vestimentas y hacerse una foto con el protagonista. Se ha convertido ya en una tradición más del desfile festivo.
"Lo hago para dar alegría a las fiestas y animar al personal, que sé que les gusta verme, y también porque me gusta mucho disfrazarme", afirma. González comenzó a llevar disfraces en Santa Ana en el año 2007 con la peña "Troppel", que empezó a construir una carroza para potenciar el desfile. Pero año tras año, la gente se fue desilusionando, dice González, y dejaron de disfrazarse. Todos menos "Plucky". "Desde el 2015 ando por libre", añade.
Empezó como invitado de boda en 2007, siguió de Chiquilicuatre, para lo que se aprendió todas sus canciones; al año siguiente fue un bebé en un carricoche y el Mundial de Sudáfrica lo convirtió en Shakira. Sevillana, vendedora de la plaza, trasgu, escocesa o morisca, el último que sacó a pasear. Aunque su preferido fue el de Freddie Mercury: "Fue el más completo, y eso que luego no podía quitar el tatuaje", recuerda.
"Plucky" nunca desvela su disfraz hasta que se lo pone. Lo hace siempre en el baño del "Guggenheim" porque él en Santiago y Santa Ana va de doblete. "Hay que salir tarde y beber poco por la noche, ir relajado para tener ganas de disfrutar el desfile y llegar hasta el Frontón con las charangas, eso es lo mejor", asegura.
Una vez vestido, acude al "Bo2" para comenzar a lucirse antes del desfile. "La gente está esperando por mí y nunca digo no a cualquier persona que quiera fotografiarse conmigo". Fotos, bailes y lo que haga falta para que los moscones disfruten, porque él ya se lo pasa pipa con sólo disfrazarse.
"Plucky" ha sorprendido a los moscones en los últimos años y tiene pensado continuar en la misma línea porque "Santa Ana es lo más grande que hay", comenta. Y también porque ya se ha convertido en un personaje del desfile que no puede faltar. Si "Plucky" no se disfraza, el desfile pierde lustre.
