"No sólo vamos a participar en la liga, sino que vamos a ganarla". De esta manera tan ambiciosa animaba Beatriz Escobedo a sus compañeras a iniciar el primer entrenamiento de lo que se espera que sea el germen del Condal femenino. Un proyecto ilusionante que ya cuenta con veinte inscritas y que ayer dio un paso más con el inicio de una preparación que tiene como objetivo la participación en las competiciones de la federación de la próxima temporada.

Lo que en un principio comenzó como una sugerencia de unos pocos se ha convertido con el tiempo en una apuesta con gran respuesta por parte de chicas tanto de Noreña como de diferentes localidades próximas como la Pola, El Berrón o Sama. "Se fue corriendo la voz y la gente respondió muy bien", explica Paula Arbesú, una de las primeras en formalizar su inscripción. Los perfiles son de lo más variados. Desde deportistas que descuelgan las botas hasta otras que sólo quieren ayudar a dar un paso más en la integración de la mujer en el deporte. "Es algo que ya tenía que haberse hecho hace muchos años", dice Verónica Ferrero, que lamenta no haber podido iniciarse en el fútbol cuando era una niña por falta de equipo. Otras aseguran ver cumplida una promesa. "Dije que no volvería a jugar hasta que hubiese equipo en Noreña y ahora no tengo excusa", declara Aitana Lastra.

De momento, los objetivos más inmediatos son los de acudir regularmente a los entrenamientos dirigidos por Juanjo Corujo, coordinador del club, que asume el encargo con la satisfacción de encontrarse una excelente predisposición. "Queremos entrenar al menos dos días porque si no no entraremos en dinámica de equipo", coincidieron en señalar varias jugadoras, rechazando la idea de entrenar un solo día a la semana, sin que el mal tiempo del estreno las echase para atrás. "Si llueve mejor, que sudamos menos", apuntan con sorna las futbolistas.

Metas para las cuales será decisivo el buen ambiente en el grupo que, a pesar de reunir chicas con edades que van desde los 15 a los 45, todas tienen claro que la pasión por el fútbol es su nexo perfecto. "Es una oportunidad que no podemos desaprovechar", declara, entusiasmada, Beatriz Escobedo.

Una tentativa que el club espera que por fin pueda llevarse a cabo tras un intento fallido hace unos años, cuando las circunstancias eran otras. "Entonces el campo de tierra y barro no ayudaba", explica el presidente del club, Corsino Suárez, en referencia a la importancia que tiene el nuevo campo de césped artificial para sacar adelante este ilusionante proyecto.