Los cambios en la ordenanza del tráfico orientados a prohibir la entrada de camiones en el casco urbano de Lugones recibieron una única alegación por parte de los transportistas, en la que solicitan que la limitación de la entrada de vehículos se establezca a partir de los que pesan 13.000 kilos y no 5.500, como aprobó el pleno municipal el pasado enero.

El periodo de información pública finalizó el jueves y, a la espera de que pudiera llegar alguna otra alegación por correo certificado u otro medio permitido no instantáneo, tan sólo la Asociación de Empresarios del Transporte y Aparcamiento de Asturias (Asetra) mostró su disconformidad con algunos aspectos de unos cambios que temen que puedan perjudicar al sector.

El colectivo alega que las 5,5 toneladas son un listón muy bajo que obligará a muchos profesionales a requerir los permisos especiales para realizar su actividad. Opinión que sustentan haciendo referencia a las ordenanzas de tráfico de otros municipios, que fijan estas limitaciones a partir de entre los 13.000 y los 15.000 kilos.

Del mismo modo, la asociación empresarial reclama a la administración local que añada a la ordenanza la obligación de que los permisos se tramiten de manera "flexible, rápida y ágil", de forma que las restricciones de la nueva normativa no afecten de manera negativa al desempeño diario de los profesionales.

Unas peticiones que ahora deberán ser valoradas por el Ayuntamiento, que deberá decidir si atiende esta petición o sigue adelante con la tramitación de una normativa con la que pretende aligerar de manera considerable el tráfico en las calles de Lugones y contribuir en la contención de los niveles de contaminación que en las últimas fechas superan en muchas ocasiones los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El procedimiento a seguir ahora es que la única alegación presentada sea valorada por la comisión informativa correspondiente antes de decidir si es tenida en cuenta o no en la propuesta definitiva de los cambios en la ordenanza que se llevará al Pleno para su debate y votación por todos los ediles de los diferentes grupos municipales.

Un proceso que, siempre y cuando no haya ningún contratiempo y la votación sea favorable, culminaría con la entrada en vigor de la limitación del tráfico a finales del mes de abril.

Cabe recordar que en el pleno ordinario de enero todos los grupos salvo Somos e Izquierda Unida, que se abstuvieron, votaron a favor de la propuesta de prohibir el tráfico de vehículos de más de 5,5 toneladas por las calles de Lugones. Esta propuesta incluyó la posibilidad de excepciones con permisos previos obtenidos de forma oral, para evitar así la obligación de imponer una tasa a los profesionales que lo soliciten.