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Estafa miles de euros a medio centenar de comunidades de vecinos en Candás

La Guardia Civil investiga los hechos tras la denuncia de uno de los numerosos afectados al administrador, en tratamiento psiquiátrico

El edificio "Pantera Rosa".

La supuesta estafa de un asesor en Candás de la que ayer se hizo eco LA NUEVA ESPAÑA afecta a medio centenar de comunidades de propietarios, según manifestaron ayer los afectados, que se concentraron junto a la oficina del administrador, una firma dedicada principalmente a ese tipo de servicios. Los vecinos apuntan directamente al gerente de la asesoría, que responde a las iniciales M.D.A.

"¿Afectados? Debe de haber por miles", señaló un vecino, que sólo en su bloque señala que "desaparecieron 40.000 euros". A esa cifra cabe sumar otras de cuatro ceros que "son incalculables", señaló otro afectado que, como todos los consultados, prefiere el anonimato. El supuesto desfalco podría rondar decenas de miles de euros.

La Guardia Civil investiga los hechos tras la denuncia, hasta el momento, de un particular que acudió al cuartel de Candás después de comprobar que el estado de las cuentas de su edificio era "netamente inferior al que debería ser". Otras fuentes manifestaron también que hay una comunidad afectada en Luanco (Gozón), lugar de residencia del supuesto estafador, natural de Langreo.

"En nuestro bloque nos levantó una letra para pagar la colocación del ascensor, que son 12.500 euros. Eso que sepamos...", expresó una mujer acompañada por su marido, ambos residentes en un edificio de la calle Carlos González Posada. La mujer llamó a la unión de todos de cara a tomar acciones legales. Algunos vecinos ya decidieron contratar un abogado para llevarles el caso.

"Hay pisos en los que desconocen el paradero de 70.000 euros, otros hablan de 60.000", añadieron. Los afectados explican que el supuesto estafador no convocaba reuniones con los propietarios y si lo hacía eran muy espaciadas en el tiempo; además, no realizaba los trámites oportunos ante las oficinas bancarias para que los vecinos pudieran consultar las cuentas, es más ni siquiera actualizaba los cambios de las juntas directivas de los bloques de pisos. "En el edificio Pantera Rosa, que se sepa, pintaron el bloque y costó 18.000 euros, los vecinos pagaron religiosamente sus cuotas y el asesor dio la espantada", explican. "Hay más que eso", apostilló una vecina de ese portal.

Según fuentes consultadas por este periódico, el supuesto estafador -que podría ser acusado por un delito de apropiación indebida al usar un dinero que debería custodiar- está recibiendo tratamiento psiquiátrico. La oficina de la asesoría en cuestión recibía ayer un constante goteo de afectados a media mañana y así siguió durante la tarde. La puerta estaba cerrada y nadie dio respuesta a sus reclamaciones.

El modus operandi del hombre era similar en todas las comunidades de vecinos afectadas. "Movía el dinero a su antojo de una comunidad para otra, por ejemplo, en la nuestra había un cargo de 1.095 euros por una obra no realizada en nuestro portal", indicó una residente en Practicante José Antonio Blanco, que recalcó que los vecinos "no tenían ningún tipo de acceso a las cuentas". "Llegaban unos recibos exagerados", apostilló otro afectado. También hubo otras consecuencias, como un corte de electricidad. Los vecinos tuvieron que hacer una derrama de 3.000 euros por un recibo del agua en Muyeres de la Paxa.

Otra vecina se enteró de casualidad del desfalco a su comunidad de garajes. "Hace poco hicimos una derrama para pagar obras de pintura, asfaltado y demás. En un principio dividimos la inversión en dos plazos, uno para abril y otro para junio. Para el primero yo pagué 167 euros y hubo gente que pagó más y no sabemos nada del paradero de este dinero", afirma la propietaria de una plaza de garaje en Reina María Cristina.

"A nosotros, en Pepe La Mata, nos sopló 15.000 euros a 30 vecinos", señaló otro afectado. Los vecinos siguen esperando una respuesta del asesor, al que describieron como un "tipo agradable, amable y con sentido del humor". Con el tiempo, esa apreciación se volvió en su contra de los vecinos. "Tenía un comportamiento extraño", señaló otra mujer, que también desveló que una empleada de la asesoría llevaba un año sin cobrar.

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