"Nos dieron bastante más de lo que habíamos pedido". Con estas palabras valora José Ramón Vicentiz, miembro del club ciclista "Yelokeai", la inauguración del circuito de ciclismo que se ha habilitado en la Pola, y que llevará el nombre de Chechu Rubiera.

El corredor asegura que quienes promovieron la iniciativa -fueron los ciclistas quienes tuvieron la idea- no esperaban por esto. Su intención era, simplemente, que cerraran el tramo sin uso del antiguo enlace de la Pola con la autovía y que lo desbrozaran, para poder usarlo con la bicicleta.

Ahora, sin embargo, tienen todo un circuito con 1.700 metros de largo para bicicletas y 1.200 metros para la práctica del atletismo, que cuenta con una zona de recreo en la que se han instalado mesas y bancos, una fuente de agua y 16 luminarias de led.

Respecto a estas últimas, Vicentiz apunta que "en el momento en el que se ponga a funcionar va a darnos un servicio muy bueno para el invierno".

Los días son muy cortos en esa época del año, y gracias a las luminarias la gente podrá ir a entrenar al circuito. "O incluso podrá servir para que los críos vayan a hacer carreras por ahí", señala.

El único pero que le ponen la mayoría de los ciclistas es el estado del piso, que no está en las condiciones que sería deseable. Aun así, celebran que se haya abierto ya para el uso.

El alcalde de Siero, Ángel García; varios concejales de Foro Asturias y representantes de la empresa que se encargó de las obras de habilitación visitaron ayer la zona del circuito para inaugurar oficialmente la apertura del servicio. A partir de ahora, los polesos dispondrán, a un paseo de la localidad, de un lugar más para la práctica del deporte.