Los jueces de paz de Asturias tienen una alta carga de trabajo. Así lo manifestaron ayer en Bárzana (Quirós), durante la asamblea anual, que contó con la presencia de la directora regional de Justicia del Principado, Encarnación Vicente Suárez; el presidente de la Federación asturiana, Manuel Ángel López; y el presidente de la Federación Nacional y Andaluza, Francisco Lasheras.

Una veintena de jueces de paz de distintos municipios abordaron la problemática que afecta a su trabajo, entre la que figuró la elevada tarea que afrontan: deben llevar a cabo todo tipo de inscripciones como nacimientos, bodas, defunciones, tutorías, conciliaciones, notificaciones, exhortos. Son servicios gratuitos para el ciudadano que, alertaron, ciertos grupos políticos pretenden derivar al sector privado.

La Directora de Justicia despejó dudas y aseguró que la figura del juez de paz, al menos durante dos años, se va a mantener así: "No se va a modificar la ley que regula estos servicios". Asimismo anunció una acción formativa destinada a estos servidores públicos.

El alcalde quirosano y el juez de paz de Quirós, Ovidio García y Ángel Fernández, respectivamente, ejercieron de anfitriones del acto. El regidor recibió un reconocimiento de los jueces por las facilidades prestadas para este encuentro. El Museo Etnográfico y la iglesia de Arroxo fueron algunos de los sitios que visitaron.