La Nueva (Langreo), L. M. D.

Entra el turno de la mañana al pozo San Luis. El trabajo en el interior de la mina es duro, muy duro, sobre todo para los jóvenes inmigrantes de otras zonas del país que hace poco que han llegado a Asturias. Los veteranos de la mina los animan. Una explosión, un derrumbe, un joven queda atrapado en el interior del pozo. La gente, agolpada a la entrada de la mina, espera inquieta. Esta es la propuesta que hace al espectador «Derrabe», la obra de Teatro «Kumen» que este fin de semana se representa en el histórico pozo de La Nueva, dentro de los actos del «Mercáu» tradicional de la Revolución Industrial.

Esta actuación no es el único aliciente para visitar la localidad. Decenas de puestos de venta con todo tipo de productos, talleres y sobre todo, una buena oferta gastronómica, completan las actividades del «mercáu». Nada más bajarse de su vehículo, al visitante ya le llega el característico olor de los corderos a la estaca. En varias partes del pueblo los asadores trabajan mientras los artesanos ofrecen sus productos. En la veintena de puestos instalados en las distintas plazas de La Nueva pueden encontrarse madreñas e instrumentos musicales hechos en madera y cuero, distintos tipos de panes, embutidos y dulces tradicionales. Las joyas, las tallas de madera, las mermeladas y las mieles también tienen sus propios puestos.

Pero por si algo destaca el «mercáu» tradicional de la Revolución Industrial de La Nueva es por la implicación de muchos de sus vecinos. La mayor parte de ellos se pasea estos días por las calles del pueblo ataviados como hace más de 100 años: pantalones de trabajo, camisas blancas, fajas, boinas y madreñas, en el caso de los hombres. Ellas lucen falda, blusa y pañuelo en la cabeza. No faltan quien va vestido de cura, de guardia civil y de patrón trajeado. Algunos incluso sacan a pasear los viejos artilugios del pasado más remoto de la zona, anterior incluso a la llegada de la actividad minera y de la revolución industrial. Así, los niños pueden darse una vuelta en burro o en carros del país tirados por bueyes. Los visitantes, además, pueden tomar parte en pequeños talleres con algunos de los artesanos que participan en la feria: los jóvenes pueden aprender cómo se hilaba o ver cómo se hacen madreñas.

Las actividades del «mercáu» tradicional de la Revolución Industrial continuarán a lo largo de toda la jornada de hoy. La obra «Derrabe» puede verse en el pozo San Luis a la una y media y las siete y media de la tarde. Otra representación, «Recuerdos», se desarrollará a las dos y las ocho de la tarde, en la casa de aseos del antiguo pozo minero. Esta obra hace un repaso por el pasado de La Nueva, una localidad que comenzó a crecer a raíz de la llegada de la minería al valle del Samuño. En la representación también se detallan aspectos de la posguerra «tratados de forma delicada». La organización ofrece además un servicio gratuito de autobuses para llegar a La Nueva.