Langreo / Mieres,

Pablo CASTAÑO

Muchas ideas, pero, de momento, poco dinero. La empresa estatal Hunosa pretende abrir nuevas vías de negocio en campos como el de las nuevas energías y maneja proyectos para avanzar en el aprovechamiento de la geotermia, el metano, el biogás y la biomasa; en la combustión limpia del carbón, y en el desarrollo de la energía eólica. Sin embargo, durante el pasado año la inversión en investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) cayó un 72 por ciento.

La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), accionista universal de Hunosa, considera la I+D+i «un baluarte fundamental en el contexto de la Ley de Economía Sostenible para potenciar los negocios actuales y promover otros que sirvan a las empresas de soporte para que en el futuro puedan competir en igualdad de condiciones en unos mercados cada vez más especializados y restringidos». Pese a esta declaración de intenciones, durante 2012, año marcado por los recortes económicos, la inversión en I+D+i se redujo en las empresas del grupo SEPI en un 22,5 por ciento. Pero además, ese recorte fue mucho mayor en Hunosa. Según los datos que maneja la propia SEPI, durante el pasado año el esfuerzo en I+D+i de la compañía estatal minera fue de 1,9 millones de euros, un 72 por ciento inferior a la cifra del año anterior.

Desde la SEPI se justifica la caída de la inversión de Hunosa en investigación, desarrollo e innovación aludiendo a varios factores. En primer lugar, «por el menor peso que ha representado el proyecto de la planta de demostración de 1 MW de captura de CO2 de La Pereda, ya en su etapa final, que ha contado con financiación del VII Programa Marco de I+D+i de la Unión Europea, con un gasto consignado de 0,8 millones de euros». Y también ha contribuido al significativo descenso de la inversión el menor gasto en 2012 del proyecto que desarrolla Hunosa con la Universidad de Oviedo y el Instituto Geológico y Minero de España (IGME) para el estudio de los recursos asociados a las concesiones mineras de la empresa, como la utilización del agua y el metano de las minas o el almacenamiento subterráneo de dióxido de carbono.

No obstante, la partida 1,9 millones de euros en I+D+i también ha permitido abordar objetivos como la mejora de la productividad en la extracción de carbón o el aprovechamiento de la energía geotérmica en el agua de mina. Durante el pasado año, Hunosa tuvo una plantilla de once personas dedicadas a investigación, desarrollo e innovación, con una cartera de seis proyectos.

Pese a la caída de la inversión en I+D+i, la presidenta de Hunosa, María Teresa Mallada, destacó recientemente en los cursos de La Granda «la importancia» de esta área para Hunosa y remarcó, sobre todo, el proyecto de captura de dióxido de carbono que se lleva a cabo en la central térmica de La Pereda con financiación de la UE y apoyo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Endesa y Foster Wheeler. «Constituye una de las investigaciones en captura de CO2 que mejores resultados está registrando en Europa», señaló Mallada, que destacó que «esta es la primera vez que se integra este sistema de captura en una central térmica con el objeto de tratar los gases reales de combustión». Además apuntó que «los buenos resultados conseguidos hasta la fecha han llamado la atención incluso de los líderes mundiales en este campo».

Junto con la combustión limpia del carbón, Hunosa también quiere avanzar el campo de las nuevas energías. «Hunosa contempla el sector energético como un campo propio, como un escalón más de la actividad minera, y en él espera crecer aprovechando recursos que ya posee», afirmó la presidenta de la compañía estatal minera, que añadió que «Hunosa tiene terreno abundante, agua, conocimiento y mano de obra formada. Por todos esos motivos, la empresa camina decidida en el sector de la nuevas energías, un sector en el que espera impulsar la descentralización del sistema y el autoconsumo, un frente que están explorando las naciones más avanzadas». De momento son declaraciones de intenciones y habrá que ver si en los próximos ejercicios estos deseos van aparejados de un incremento de las partidas en investigación, desarrollo e innovación.