El futuro de las infraestructuras de la ciudad

La cubierta de la estación de Gijón: paseable, verde y con aberturas para que entre luz natural

Los socios de Gijón al Norte pactan derribar el viaducto de Carlos Marx en 2025 como anticipo de la construcción de la intermodal de Moreda

Vídeo: Así será la futura estación de trenes y buses de Gijón

"Como elemento arquitectónico es de primer nivel, moderno, funcional y muy luminoso, y desde el punto de vista urbano es una solución de integración amable en un gran corredor verde. Estamos ante un símbolo del que será el futuro de Gijón". Así definía ayer el secretario de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible, José Antonio Santano, el proyecto de estación intermodal de Moreda y el desarrollo de la trama urbana que conlleva tras presidir en el salón de recepciones del Ayuntamiento el consejo de administración de Gijón al Norte donde se dio una aprobación unánime al diseño presentado por Adif. A su lado, en la mesa presidencial del consejo, la alcaldesa, Carmen Moriyón, y el consejero de Fomento del Principado, Alejandro Calvo. Vicepresidentes primera y segundo de la sociedad que gestiona el plan de vías de Gijón.

Una Carmen Moriyón que festejó que la reunión «hubiera transcurrido dentro de la normalidad, entendiendo por normalidad no comunicar retrasos ni proyectos de los que se desiste» recordando con ello el último encuentro con Santano, donde se les anunció el fin del vial de Jove soterrado. Y un Alejandro Calvo para quien la cita supuso «dar varios pasos decisivos para la integración ferroviaria en Gijón, que es una pieza fundamental para la movilidad de Asturias y para la conectividad de nuestra región con el resto de España». Y por ello se felicitó paro también por «que el Ministerio haya escuchado a Ayuntamiento Principado en la solicitud de poder hacer algunos avances parciales para ir regenerando la zona», indico en referencia a la demolición del viaducto de Carlos Marx. Moriyón, por su parte, centró su interés en reordenar el Solarón y avanzar en un nuevo convenio de «Gijón al Norte».

Para que los bocetos ayer presentados, y que profundizan en los adelantados por LA NUEVA ESPAÑA en junio de 2023, se conviertan en un proyecto final que sacar a licitación aún habrá que esperar a 2026. Entonces se conocerán plazos y costes que ayer Santano fijó en "años" y en "entre 350 y 500 millones". Pero no habrá que esperar tanto para tener el proyecto básico de la intermodal, que se espera para el verano, y para ver máquinas trabajando en la zona.

Y es que el consejo asumió la petición municipal de adelantar el derribo del viaducto de Carlos Marx y la urbanización de esa zona. ¿Cuándo? La previsión es tener el proyecto antes de que acabe este año y licitarlo en el segundo semestre del 2025. Al tiempo, el Ayuntamiento avanzaría en los trámites urbanísticos. "Se trata de pasar de las palabras a los hechos", concretó el secretario de Estado, aunque sin definir ni costes ni plazos de esa pieza adelantada.

No hay un compromiso tan firme con la conversión del Solarón en parque. "Comprendo el planteamiento de que puede ser un pulmón para Gijón", concretó Santano, pero desde el Ministerio quieren tener claros los costes jurídicos, patrimoniales y económicos de renunciar a la financiación que suponen las plusvalías por la venta del terreno. El pacto es organizar una mesa de trabajo donde estén los tres socios del plan de vías para estudiarlo y avanzar tanto en el diseño final para la zona como en el planteamiento de acondicionar los terrenos más cercanos al Museo del Ferrocarril, que siguen siendo de Adif y que deben ser recepcionados por "Gijón al Norte".

Además de todo esto, se trabaja en el desarrollo del convenio que fije las condiciones de cada socio en la nueva intervención. Ya hay algún borrador en marcha, pero se espera al verano para tener cifras claras con las que fijar compromisos. "Hoy podemos decir que esto ha arrancado. Ya ha empezado", explicaba el exalcalde de Irún tras presentar a los consejeros una propuesta que va más allá de hacer un edificio de acceso a los servicios de largo recorrido, cercanías, ancho métrico y estación de autobuses. Todos ellos en superficie menos cercanías que va soterrado para enlazar con el túnel del metrotrén, cuya prolongación hasta Cabueñes también está en tramitación, pero por otra vía. 

La propuesta ferroviaria para Moreda supone que las vías de Cercanías salgan por la derecha de las generales para entrar en el túnel del metrotrén bajo las de largo recorrido, con lo que se ocupa menos parque de Moreda y se libera espacio junto a la avenida de Sanz Crespo para colocar la estación de autobuses. También se ha optado por una ejecución en mina del tramo de túnel entre la estación y el pozo por el que se extrajo la tuneladora para evitar afecciones sobre las aguas subterráneas de la zona. El servicio de Cercanías, al ir soterrado, será el primero en ejecutarse, lo que permitirá que el metrotrén pueda ser utilizable, aunque no se haya completado todo el complejo intermodal.

El edificio de la estación intermodal será accesible desde las remodeladas calles Carlos Marx y Sanz Crespo y en su interior destaca un vestíbulo central a doble altura que permite a cada viajero ir al transporte que quiera de una manera natural e intuitiva, aseguran los redactores del proyecto de la UTE integrada por las firmas B720 Fermín Vázquez Arquitectos, Esteyco y Geocontrol. A lo largo del edificio habrá también espacio para locales comerciales y servicios para los usuarios. 

Un elemento central es la cubierta, que se diseña con zonas abiertas para garantizar ventilación e iluminación natural en los andenes. Eso sí, la parte cubierta es transitable con paseos peatonales entre vegetación y una anchura de 20 metros que pretenden prolongar el parque de Moreda sobre los andenes. De hecho, los redactores hablan de "convertir el parque de Moreda en el parque de la Estación". 

Una longitud de 220 metros y un ancho de 30 dan forma, por otro lado, al espacio de la estación de autobuses, que ya se integra en un proyecto que antes era exclusivamente ferroviario y que tendrá una conexión directa con el vestíbulo de la estación de tren a través de una zona cubierta. Serán veinte dársenas en espina de pez, tres dársenas lineales, un punto de venta de billetes, tres zonas de oficinas, aseos y cafetería en un espacio independiente, pero que debe tener una coherencia operativa y estética con el resto del complejo intermodal. 

El edificio de viajeros no es el único nuevo que van a ver los gijoneses. Hay otro no muy lejos de la Comisaría de la Policía Nacional de El Natahoyo, que será de Adif. Es un edificio de oficinas de 4.500 metros cuadrados con una planta baja abierta al uso público y un aparcamiento de 100 plazas abierto a conectarse, o no, con el aparcamiento de la intermodal. 

El aparcamiento subterráneo vinculado a la estación tiene 207 plazas para coches, ocho para personas de movilidad reducida, ocho para motocicletas y dos espacios para carga y descarga. A los que se suman tres locales para alquiler de vehículos. Y ya en superficie y en el lateral del vestíbulo principal un espacio para una veintena de taxis, dos autocares, 25 motocicletas, cinco plazas de lo que se denomina "kiss&train" (donde el coche se detiene lo justo para que baje algún usuario y se va) y 20 plazas para la comisaría; además de un área para equipos de emergencias. 

El diseño de la zona del plan de vías conlleva todo un cambio urbanístico y de movilidad a partir de reformas sustanciales en Sanz Crespo, Carlos Marx, Príncipe de Asturias y José Manuel Palacio. Sanz Crespo se recupera tras el derribo de la actual estación provisional como avenida de cuatro carriles, dos en cada sentido separados por una mediada arbolada con carril bici, desde la entrada a Gijón hasta una nueva glorieta en la intersección con Carlos Marx. Ese nuevo vial, cuyo trazado desveló LA NUEVA ESPAÑA, se convierte en la barrera que separa el complejo de la futura comisaría de la Policía Local y el actual Palacio de Justicia, de la acera que permite acceder a la estación de autobuses en superficie y elevarse hacia la zona de paseo sobre la estación de tren. 

También habrá árboles entre los dos carriles de circulación en cada dirección de la remodelada Carlos Marx, que tendrá en ambos lados espacio de parada de autobuses y una zona verde y estancial en su confluencia con la plaza de acceso a la estación intermodal. 

Un poco más al oeste, pero también dentro del marco de la actuación, está la propuesta a desarrollar en la avenida del Príncipe de Asturias donde se fija una nueva glorieta que conecta de manera directa con la avenida de José Manuel Palacio y da servicio a los polígonos de la zona al tiempo que conecta la red de carriles bici. En ese ámbito, que se prolonga hasta la calle de Bertolt Brecht, José Manuel Palacio duplica la calzada con dos por carriles por sentido.

El proyecto supondrá también reordenar la red de carriles bici, actuar sobre colectores de la red de la Empresa Municipal de Aguas reponer el trazado del camino de Santiago que pasa por la zona oeste.

Por otro lado, y en el mismo marco del consejo de Gijón al Norte se aprobaron tres asuntos: el nombramiento de Irene Bonet, secretaria general de Adif y Adif AV como secretaria no consejera de la sociedad, la aprobación de la gestión social y de las cuentas sociales correspondientes al ejercicio 2023 con un un resultado negativo de 379.382,78 euros y la renovación de PKF Attest servicios empresariales, SL, como auditor de la sociedad para los trabajos de la auditoría de cuentas del ejercicio 2024 por importe de 8.900 euros (sin IVA).