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Los queseros reclaman ayudas para poder abrir mercados fuera de Asturias

Los productores critican en La Foz la escasa promoción de las variedades locales y piden a los hosteleros que las introduzcan en sus cartas

Verónica Álvarez. FERNANDO GEIJO

Los quesos asturianos tienen un mercado reducido. Ése es el principal problema que afecta a los queseros de la región, que ofrecen un producto de calidad, pero de difícil comercialización. Los profesionales aspiran a tener presencia en mercados fuera de la región, pero no hay recursos ni un proyecto conjunto: "No contamos con suficientes ayudas y, además, falta algo de unión en el sector", lamentó ayer Isaura Souza, presidenta de la Asociación de Queseros Artesanos del Principado de Asturias.

La Foz de Morcín acogió ayer la XXVII Edición de la Feria de los quesos artesanos, evento enmarcado dentro del programa de las fiestas de La Probe. El encuentro reunió a 18 artesanos de la región. No hace mucho la cita recibía a no menos de una treintena. El sector no pasa por su mejor momento, como reconocen sus portavoces, aunque nadie pone en duda su inmenso potencial económico. "La unión dentro del sector es fundamental. Todos juntos podemos intentar salir fuera y dar a conocer nuestros productos, algo que ahora se intenta a título individual, lo que hace imposible alcanzar los objetivos", remarcó Isaura Souza . Los queseros echan en falta más apoyo institucional: "A nivel individual es complicado. No tenemos dinero para hacer campañas de promoción y no podemos participar en ferias, ya que no hay recursos económicos", señaló la presidenta de la asociación regional.

No todo radica en captar subvenciones. Los productores ven otros problemas. También hacen autocrítica: "Nos cuesta ponernos de acuerdo, tal vez porque estamos muy desperdigados por la geografía asturiana y en muchos casos hay poco contacto", afirmó Souza. Además, perciben que otros colectivos profesionales podrían arrimar el hombro. "En Asturias los restaurantes deberían tener una amplia variedad de quesos asturianos en sus cartas y no ofrecer únicamente Cabrales y manchego, como sucede en muchos casos", señalaron ayer los portavoces del sector. Y añadieron: "Lo fundamental es que los asturianos confiemos en nuestros productos. Tenemos que defender lo nuestro como primer paso para poder salir fuera a competir".

La Asociación de Queseros Artesanos del Principado de Asturias tiene actualmente 44 socios, aunque únicamente 36 son productores. En todo el Principado hay cerca de 70 variedades queseras artesanas, que convierten a la región en la mayor mancha quesera de Europa. Pese a todo, de momento únicamente cuatro variedades tienen aprobada la denominación de origen europea. Se trata del Cabrales y el Casín. " La calidad es muy buena, aunque es cierto que se trata de un producto caro", matizó ayer Souza. Los productores hacen una análisis realista: "El queso asturiano tienen un precio alto. Unos padres que tienen que dar de merendar a sus hijos y no tiene demasiado dinero al final se inclina por una variedad más barata". Asumiendo esta desventaja, los artesanos consideran que hay un amplio mercado por explotar. El colectivo, pese a todas las trabas, está desarrollando iniciativas promocionales para reforzar su presencia en otras regiones. La asociación ha grabado un vídeo de tres minutos de duración sobre los quesos asturianos. Además ofrece información a través de la página web: www.asociacionqueserosartesanos.com.

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