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León condiciona la fusión entre Fuentes de Invierno y San Isidro a la línea eléctrica

La Diputación exige un acuerdo al Principado, que necesitaría unos tres millones para engancharse al tendido

Esquiadores en Fuentes de Invierno. LEONCIO CAMPORRO.

La unión tanto física como administrativa de las estaciones de esquí de Fuentes de Invierno y San Isidro penden de un hilo. O mejor dicho, de varios, los que forman el tendido eléctrico, una infraestructura que será fundamental en el desarrollo de las conversaciones entre las administraciones leonesa y asturiana. Desde la Diputación de León son tajantes y afirman que cualquier tipo de negociación con el Principado los dos complejos invernales pasará necesariamente por resolver el contencioso que mantienen sobre la línea eléctrica. Y es que el suministro energético en el puerto ha sido durante los últimos años un caballo de batalla entre las dos administraciones.

Las negociaciones han sufrido un largo parón debido, en buena medida, a la convulsa situación política que atravesó la Diputación de León, primero con el asesinato de la que era su presidenta, Isabel Carrasco, y la posterior imputación de su sucesor, Marcos Martínez, en el caso "Púnica". Ahora, con el clima político regional estabilizado y la temporada de esquí finalizada en el caso de Asturias y prácticamente terminada en el caso de León, es la hora de ponerse a hablar de nuevo de los planes de ambas regiones para sus complejos invernales. Y la Diputación leonesa ya ha puesto su principal condición: cualquier paso hacia la fusión de la allerana Fuentes de Invierno con San Isidro deberá recoger previamente un acuerdo sobre la línea eléctrica que abastece a la estación leonesa y que aspira a hacerlo también a la asturiana.

Ambas administraciones han tenido ya varios desencuentros sobre la financiación de la línea. En un primer momento, y antes de ejecutarse el proyecto, Asturias y León habían pactado sufragar el coste del tendido, que finalmente ascendió a 12 millones de euros a partes iguales. Sin embargo, el gobierno asturiana dio marcha atrás y se negó a cumplir aquel acuerdo. Hubo varias negociaciones, pero ninguna fructificó. La provincia vecina decidió abordar el proyecto en solitario y, en el otoño de 2012, el tendido fue una realidad y comenzó a abastecer tanto a la estación de San Isidro como a los pueblos y urbanizaciones cercanos. Fuentes de Invierno, sin embargo, sigue alimentándose con unos vetustos generadores de gasóleo.

Hace unos días, el Consejero de Educación, Cultura y Deporte, Genaro Alonso, aseguraba que llevar la línea a Fuentes era una "prioridad", aunque en sede parlamentaria reconocía que la inversión necesaria rondaba los 5 millones de euros. Según el convenio de resarcimiento que León firmó con Iberdrola, cualquiera que se quiera enganchar a la línea deberá pagar 1,5 millones de euros por megavatio a la Diputación de León.

En el caso del Principado, las cuentas salen algo más económicas de lo citado por el Consejero, aunque la inversión sigue siendo importante. Los cálculos pasan porque para electrificar Fuentes de Invierno se necesitan 1,5 megavatios, por lo que el dinero a pagar a León sería de 2,25 millones de euros en concepto de indemnización. Además, a ello habría que sumar cerca de otro medio millón para la puesta en marcha de la obra civil para unir la subestación eléctrica de San Isidro con la estación invernal allerana. En total, algo menos de 3 millones.

La reunión entre la Diputación de León y el Gobierno del Principado tendrá lugar a primeros de mayo, y ahí se comenzarán a dar los primeros pasos de cara a la futura y esperada fusión de ambas estaciones, que formarían en su conjunto uno de los dominios esquiables más importantes del norte de España.

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