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La "falta de rigor" en las contrataciones condujo a los "sobrecostes" de los festejos

El informe de la administración concursal es crítico con la gestión de la Junta Directiva de Festejos "Santiago" y de su entonces presidente, Javier Tato. Para el administrador, en el devenir de la entidad "se evidencia una falta de rigor y control de la sociedad, incumplimientos en la llevanza de la contabilidad y carencia de una mínima diligencia por parte del presidente de la sociedad y de su Junta Gestora y Directiva para corregir la situación de desequilibrio patrimonial e insolvencia generada por su gestión en la sociedad".

El escrito argumenta que "la falta de acción" por parte de los responsables de la entidad determinó "la insolvencia de la deudora" y ha "agravado su situación en términos de difícil valoración por el momento ante la falta total de documentación contable y financiera, que en ningún caso puede servir de excusa sobre las responsabilidades en que pudieran haber incurrido y que se analizarán en una fase posterior".

Para el administrador concursal, tal y como refleja en su informe, "resulta evidente la falta de rigor en la contratación de servicios, que si no responde a dolo, sí es susceptible de incardinarse dentro de la culpa grave" y ha "conducido a un sobrecoste en la celebración de los eventos que ha supuesto la imposibilidad de atender con las obligaciones de pago, derivando en un sobreseimiento general de las mismas y en un embargo generalizado de sus bienes".

Además, esa situación, según remarca el escrito, se produjo "sin que ningún miembro de la Junta Directiva, ni de su última Junta Gestora, haya adoptado medida alguna de corrección de la situación o que el presidente, que ha ejercido su cargo al menos desde el 24 de octubre de 2007, haya presentado su dimisión sin adoptar medida alguna para corregir la situación descrita".

La situación de "Santiago" se conoció a finales de 2014, cuando trascendió el embargo de sus bienes tras la denuncia por impagos presentada por la empresa de organización de espectáculos Antonio 33. En noviembre se realizaron diversas asambleas que terminaron en la dimisión Javier Tato, al que los socios acusaron de ocultar toda la problemática. Después, "Santiago Apóstol" se quedó a la deriva tras la dimisión de sus últimos directivos.

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