Los vecinos y hosteleros del entorno del parque Jovellanos están en pie de guerra. En los últimos meses, desde que empezó el verano, se despiertan tras los fines de semana con una desagradable sorpresa: las zonas verdes del parque llenas de pañuelos, vasos de plástico y botellas de cristal. Aseguran que son los restos de los "botellones" nocturnos que se están popularizando en la villa. Reclaman más vigilancia en la zona y mayor celeridad por parte del Ayuntamiento para eliminar las "pruebas" de las noches locas.

Aurora Díaz es la abuela de una pequeña que este verano ha jugado cada mañana en el parque Jovellanos. "No es normal que los niños tengan que convivir con esta suciedad", señaló la mierense. Desde su punto de vista, esta situación es "peligrosa". Entre los restos de este fin de semana hay algunos cristales, "cualquiera puede caerse y hacerse daño o un niño podría agarrar una botella rota y cortarse".

El entorno del parque Jovellanos es una zona de concentración de establecimientos hosteleros. Los responsables de los bares, según explicaron ayer portavoces del sector, llevan ya unas semanas alertando al Ayuntamiento de la "moda" de hacer "botellón" en el parque Jovellanos. Hasta ahora el ocio nocturno en Mieres se concentraba en la calle Covadonga y la Villa, por lo que la vigilancia se centra en esa zona.