El Museo de la Minería y la Industria de El Entrego consolida su tendencia al alza en el volumen de visitantes. Después de unos años en los que la crisis económica repercutió de forma muy negativa en la cifra de turistas, el complejo cultural sumará este año su tercer ejercicio consecutivo en el que aumentan los visitantes. En concreto, el Mumi, que cerró 2016 con un total de 60.188 turistas, prevé rebasar los 62.000 al final del presente ejercicio. El horizonte para 2018 está fijado en 64.000.
Así lo explicó el director de la instalación cultural Santiago González Romero. "Es el tercer año en el que aumentan las visitas y podemos decir que esa tendencia se está consolidando después de unos años complicados en los que todo el sector turístico y cultural se resintió como consecuencia de la crisis. Bajan los turistas, los autobuses de las visitas colectivas vienen con menos gente, caen los recorridos de los colegios...". La situación ha experimentado un cambio en los últimos años y el futuro se encara con mayor optimismo. "La estimación es acabar este año con 62.000 visitantes, casi 2.000 más que en el pasado ejercicio. Y el cálculo para 2018 es llegar a los 64.000 visitantes", argumentó el responsable del Mumi.
El centro cultural volvió a rebasar en 2016 los 60.000 visitantes, 5.000 más que en 2015, cuando el museo alcanzó una afluencia de 55.395 personas. El incremento de turistas de los últimos años también se ha traducido en una subida de los ingresos propios. De esta forma, de los más de 60.000 visitantes de 2016, un total de 35.083 (58%) llegaron al centro cultural en grupos organizados, mientras que el resto lo hizo de forma particular.
El Mumi tuvo en 2014 la peor cifra de visitas de su historia, por debajo de los 55.000 personas, sin contar las invitaciones y entradas institucionales. Incluso en el año de la apertura del centro cultural, en 1994, se había registrado un mayor volumen de visitas: 60.129. La afluencia había consolidado en los años siguientes una evolución al alza, con ligeros altibajos, hasta conseguir en 2007, un año antes de que comenzase la crisis económica, sus mejores resultados históricos, con 105.261 visitantes.
El centro cayó entró entonces en una fase de caída de turistas. En 2008, ya se contabilizaron 92.144 visitantes y en 2011 hubo 86.227. La bajada fue continuada hasta 2014, cuando se cayó por primera vez de los 60.000, debido a la crisis generalizada del sector turístico en la región y le pérdida de visitantes. La tendencia ahora parece haber cambiado, con un repunte consolidado.
La subida de las visitas también está repercutiendo en el aumento de los ingresos propios del Mumi, algo clave para aumentar los contenidos expositivos del centro. La idea de los responsables del Museo de la Minería es poner en marcha las nuevas dependencias museísticas del Museo del Movimiento Obrero por fases, a medida que haya recursos para ir abriendo los diferentes espacios expositivos. La caña del pozo San Vicente ya está conectada con el edificio principal a través de una galería subterránea.
