Avilés, Vicky FUERTES
El Club Marino de Luanco afronta una temporada llena de ilusión y marcada sobre todo por el ansiado retorno del primer equipo a la Segunda División B después de dos temporadas consecutivas en Tercera. Los de Quirós, además, están haciendo una muy buena campaña y de seguir en la misma línea de buen juego, no hay duda de que lograrán el gran objetivo de la permanencia.
El buen trabajo que la entidad lleva haciendo desde hace años en Luanco en la promoción del fútbol, hace que éste sea por méritos propios uno de los deportes de referencia en el concejo de Gozón y que más deportistas aglutina.
Las categorías inferiores del club azulón dan cabida a cerca de ciento cincuenta jugadores repartidos en diez equipos, seis de fútbol sala y cuatro de campo, y desarrollan su actividad en el polideportivo de Luanco y en las instalaciones de Balbín. El club está haciendo una buena captación entre los niños del concejo y, como es ideal, es en las categorías inferiores (minibenjamines, prebenjamines y benjamines) donde más equipos tiene.
El organigrama deportivo del club está formado por dos equipos de minibenjamines, dos prebenjamines, dos benjamines, un alevín, un infantil, un cadete y un juvenil, a los que hay que sumar el ya citado primer equipo y buque insignia de la entidad que preside Luis Gallego, uno de los dirigentes más vetaranos del fútbol y del deporte asturiano en general.
El trabajo de captar niños es tarea ardua para los técnicos del Marino, según reconoce el coordinador deportivo, José Antidio García, Tivo. « Encontrar jugadores en una villa tan pequeña como Luanco resulta a veces tarea muy complicada porque con una población de apenas seis mil habitantes no es fácil conseguir chavales, y más aún cuando hay otros deportes a parte del fútbol»,explicó.
La filosofía general del Marino es muy clara: los resultados cuentan y es importante que los equipos estén lo más arriba posible porque cuanto mejor sea la competitividad, mejor se formarán, pero sin descuidar el aspecto educativo que conlleva el trabajar con niños de tan poca edad. Y en términos generales, el objetivo marcado para esta temporada es el ascenso del benjamín A y del alevín, que están completando una buena temporada y que cuentan con serias opciones de conseguir el ascenso a Primera y Segunda categoría, respectivamente.
El juvenil, por contra, está pasando verdaderos apuros y tendrá que pelear mucho hasta el final de la temporada si quiere eludir el descenso a Tercera. Los de Luanco son décimocuartos de los dieciocho equipos que forman el grupo A de Segunda y llevan un año muy irregular, aunque las dos victorias consecutivas que lograron en los últimos partidos ante el Codema por 4-6 y el San Esteban, por 5-0 les permiten coger aire, al tiempo que ponen fin a una serie de malos resultados y le hará escalar posiciones en la tabla.
Varios jugadores han tenido recompensa a su trabajo y ya han realizado entrenamientos y disputando partidos amistosos con el primer equipo de Segunda B. Y algunos de sus compañeros de pasadas temporadas encontraron acomodo en otros equipos, algo que llena de satisfacción a Tivo. «Me congratula ver a Alejandro Avendaño en el Universidad de Oviedo, de Tercera y a Ramonín González en el Uni B. Es más, siempre que puedo les sigo y mantengo el contacto con ellos en todo momento», explicó el coordinador.
Tanto Avendaño como Ramonín tuvieron minutos en Tercera con el primer equipo, siendo aún juveniles, a las órdenes del técnico Rogelio García.
