Madrid, Efe
El Real Madrid acoge en el estadio Santiago Bernabeu la primera tentativa de cantar el alirón, proclamándose campeón de Liga ante un Athletic motivado con el regreso de Gurpegui, siempre y cuando los blancos venzan y no lo haga el Villarreal, después del tropiezo de anoche del Barcelona.
Un Bernabeu lleno hasta la bandera recibe al Athletic con ganas de celebrar la segunda Liga consecutiva, un hecho que lleva 18 años sin conseguir el Real Madrid.
El partido que cierra la jornada permitirá que los jugadores madridistas salten al campo conociendo el resultado del Villarreal en Sevilla (ante el Betis). En caso de que los castellonenses no ganen, la plantilla blanca podrá cumplir su deseo de certificar el campeonato ante su afición y recibir pasillo el 7 de mayo de su eterno enemigo.
No hay ansiedad en el Real Madrid. La amplia diferencia respecto a sus perseguidores les hace estar convencidos de que el título es cuestión de días. Si no este domingo, será la próxima jornada en El Sadar o con el morbo seguro ante el conjunto azulgrana en el coliseo blanco.
Llega Schuster a la opción de ganar su primer título como técnico, sin poder repetir su defensa preferida. Cannavaro debe cumplir sanción y su ausencia permitirá la entrada de Marcelo en el lateral y que Heinze juegue en el centro de la zaga. También regresa Guti, tras cumplir sanción en Santander. Curiosidades del fútbol, el Real Madrid siempre ha ganado sin su segundo capitán, aunque él ha sido la principal fuente del buen juego de esta temporada. Finalmente, Schuster sigue los planes con Van Nistelrooy. Pese a que el holandés se reincorporó al grupo esta semana, recuperado de la sinovitis que le hizo pasar por el quirófano, su regreso será la próxima semana. También se pierden el encuentro Metzelder, por lesión, y Salgado y Soldado, por decisión técnica.
