Gijón, Ángel CABRANES

Importantes son los goles y mucho más cuando anota Kike Mateo, que ha contribuido esta temporada a anotar algún tanto crucial. Era uno de los primeros en salir de los vestuarios, satisfecho y relajado, «ha sido clave la actitud que han mantenido mis compañeros y el público para, al final, conseguir una victoria épica», comentaba modesto. Una modestia de la que hizo gala cuando, al notar unas molestias, rápidamente avisó al banquillo para que le sustituyeran, «quería que entrara alguien para ayudar al equipo, ya que noté una sobrecarga y no podía hacer más. Íbamos con uno menos y no podíamos tener el lujo de perder un jugador más», explicó de manera coherente uno de los fichajes clave esta temporada para el ascenso.