Gijón / Oviedo, J. E. CIMA
Los asturianos Samuel Sánchez (Euskaltel), Chechu Rubiera y Dani Navarro (Astaná) y Carlos Barredo (Quick Step) se marchan hoy para Assen (Holanda), donde comienza el sábado la Vuelta a España. Llevan unas maletas cargadas de ilusiones, donde el campeón olímpico dice que «en esa prueba lo único que me falta es ganarla, tras vencer en etapas, y acabar en el podio, y mi preparación va encaminada a eso. Voy a por la Vuelta». Los gijoneses Chechu Rubiera, Carlos Barredo y Dani Navarro, los tres formados en la escuela de Las Mestas, buscarán una victoria de etapa en la ronda española. No estará el cangués Luis Pasamontes (Caisse d'Epargne) debido a las heridas en la cadera de una caída.
El trío gijonés realizó ayer el último entrenamiento en Asturias de forma suave por el alto de la Madera, Pola de Siero y Nava, mientras que Samuel Sánchez se machacó en series en subidas en el puerto del Cordal y al final en las duras rampas del Naranco, para constatar que ya tiene el gran nivel que deseaba.
Samuel Sánchez (Oviedo, 1978) dice de la Vuelta que «es más dura que si viniese a Asturias, porque tiene subidas largas por Levante y el Sur como Aitana, Velefique, Sierra Nevada y La Pandera, que con 36 grados de calor hará mucho daño. Se parecerá mucho a las etapas del Tour».
El ovetense añade sobre sus opciones de triunfo que «ganar nunca es fácil porque no corres solo y hay grandes ciclistas como Basso, Valverde, Tondo, Mosquera, Gesin, Evans o los hermanos Schleck. Además, luego dependes de factores de suerte como que responda bien el cuerpo, no tengas caídas y del equipo para controlar. La Vuelta siempre es una carrera loca, y cuando estaba Contador controlaba, y eso nos beneficiaba a todos para jugártela al final. Lo bueno es que llego bien y aunque me cuesta al principio coger el ritmo de carrera porque voy de menos a más, la gran dureza está en la última semana y media. Habrá que tener cuidado con los cortes por el viento».
El maestro Chechu Rubiera (Gijón, 1983) afrontará ahora su octava Vuelta, junto a sus delfines Carlos Barredo (Gijón, 1981), que correrá su cuarta Vuelta, y Dani Navarro (Gijón, 1983) se estrenará en la carrera española. En el Astaná a última hora entró Vinokourov, una imposición del equipo kazajo, que así permitirá a Armstrong, Bruyneel y Rubiera montar el nuevo equipo en la próxima temporada, pero eso hipoteca las opciones individuales de los gijoneses.
Chechu Rubiera señala que «al correr Vinokourov tenemos un hombre importante para la general, porque ya sabe lo que es ganar la Vuelta. Y aunque estuvo parado dos años por una sanción, tiene un nivel de superclase, como lo demostraron otros de ese tipo en sus respectivas Vueltas, como Armstrong y Basso. A Samuel le veo para estar entre los cuatro primeros, pero no creo que para conseguir la victoria».
Más se lamenta Dani Navarro, porque «sin Vinokourov pienso que podía estar entre los quince mejores en la montaña y luchar por buscar un triunfo de etapa. Pero con el kazajo seguramente me tocará trabajar mucho en los primeros días sin montaña. Eso desgasta mucho y luego tendré limitadas mis oportunidades de escaparme».
Todo lo contrario de Carlos Barredo, porque en su equipo, el Quick Step, «no venimos con un líder para la general. Sí para los sprints, con Alain Davis y Tom Boonen, para los que trabajaré unos días, pero tendré muchas opciones a buscar una fuga triunfal. Ése es mi objetivo».
«Será muy dura por los largos puertos y el fuerte calor; se parecerá al Tour»
Samuel Sánchez
«Vinokourov es un superclase, así tenemos un ciclista para la general»
Chechu Rubiera
