Gijón, Á. CABRANES

Casi una semana después, en partido correspondiente a la OK Liga femenina, Biesca Gijón y Alcorcón reeditaron ayer la final de la Copa de Europa. Lo hicieron con idéntico resultado. Las gijonesas se volvieron a llevar la victoria gracias a un solitario gol de Luchi en el minuto 31. Un triunfo que, a falta de siete jornadas para el final del campeonato, mantienen intactas las opciones por el título de las jugadoras de Fernando Sierra. Además, el Biesca continúa como único equipo invicto de la categoría.

Las prolongadas celebraciones durante la semana del tercer título europeo del Biesca Gijón hacían dudar de su capacidad para preparar un choque vital de cara a continuar en la zona alta de la Liga. Pero las discípulas de Fernando Sierra volvieron a dejar claro su gran estado de forma, en un choque donde el Alcorcón volvió a estrellarse con la portería de Christina Klein. Ambos conjuntos iniciaron el partido de manera muy defensiva, aunque el control del juego estuvo del lado de las gijonesas.

En la reanudación, la tónica del partido no cambió en exceso, pero en esta ocasión sí llegó el gol. Fue en el minuto 31, al transformar Luchi Agudo un penalti en área visitante. También las madrileñas dispondrían de un lanzamiento desde el punto fatídico, pero Christina acertaría muy bien en los dos lanzamientos de los que gozó Carolina Escobar para batirla.

El Biesca pudo aumentar su cuenta. Luchi dispuso de una clara ocasión para transformar el segundo a lanzamiento de falta. Esta vez su envío terminó lejos de las mallas defendidas por la madrileña Marina Curto.