Oviedo, Nacho AZPARREN

Para muchos en el vestuario, el empate ante la Real Sociedad dolió de forma especial. La igualada sin tantos no hizo otra cosa que confirmar alguno de los males que están acompañando al Oviedo de la presente temporada hasta dejarlo cerca de los puestos de descenso. Pero los condicionantes que rodeaban al partido eran en esta ocasión distintos. A la concentración previa en los aledaños del Tartiere le siguió un apoyo total al equipo. Durante noventa minutos, los jugadores tuvieron el aliento que habían demandado durante la semana. No fue suficiente y el Oviedo sumó una nueva decepción.

«Nos fastidia no haber ganado por la gente», acierta a decir tristemente Gonzalo cuando se le menciona el apoyo desde la grada. Más exhaustivo en sus explicaciones es otra de las novedades el domingo, Xavi Moré: «Parece que la afición está luchando por otras causas pero cuando tiene que estar con nosotros lo hace. No tenemos nada que reprocharles. Se merecen un diez».

Con el empate ante la Real Sociedad B, el Oviedo suma ya ocho jornadas sin ganar. Una racha que ha llevado a los de José Manuel a un sólo punto del descenso directo. El técnico azul intentó el domingo un nuevo lavado de cara con cuatro novedades en el once respecto al partido en Tajonar. Negredo, Gonzalo, Aitor Sanz -que ante Osasuna Promesas estaba sancionado- y Xavi Moré jugaron de inicio. Para algunos, como Gonzalo, el ingreso en el equipo titular le supone una alegría menor. «Hacía seis meses que no era titular en el Tartiere en el puesto de central, pero no puedo estar satisfecho del todo porque ahora sólo nos vale sumar de tres en tres», comenta el de Burgos.

Peor pintaba el panorama para Xavi Moré en las últimas semanas. El extremo no era titular con la camiseta azul desde el duelo en Mendizorroza ante el Alavés. Moré es consciente de los errores cometidos ante el filial donostiarra. «Defensivamente estuvimos casi perfectos, pero si no generas ocasiones es imposible que ganes partidos. Hasta tres cuartos de campo manejamos el partido pero más adelante nos falta acierto», analiza el jugador.

Sin tiempo para relamerse las heridas, el Oviedo ya prepara el partido ante el Real Unión de Irún, cuarto en la Liga. Ante el pesimista panorama, los jugadores prefieren ver el lado positivo de un duelo de esta magnitud. «Irún puede ser un buen escenario para cambiar la dinámica. Hay que dar una alegría a esta afición», asegura Moré. «Sinceramente, ahora mismo nos da igual jugar contra un equipo de arriba que uno que esté en descenso porque nos cuesta igual», reflexiona Gonzalo. «Jugar contra un favorito quizás nos dé un punto de motivación extra para demostrar a la gente que no somos tan malos como hemos demostrado hasta ahora», afirma.

Xavi Moré añade más dosis de realismo a la situación en la tabla: «Acumulamos ocho jornadas sin ganar y luchamos por no caer al descenso. Sólo nos queda demostrar por qué nos ficharon en su momento».

Los jugadores tampoco evitan el debate sobre el futuro inmediato del club, con el cambio de propietario en el horizonte más próximo. «Puede haber algo de incertidumbre porque un cambio de accionariado siempre lo provoca pero no es excusa para los resultados. Llevamos así dos meses y entonces no se hablaba de estos cambios», asevera Moré. Para Gonzalo, el futuro del club no debe preocupar en exceso a los jugadores.

«Nosotros somos peones. No tenemos ni idea de lo que pasará pero las cosas del club no debemos manejarlas nosotros», indica el zaguero.