Gijón, J. E. CIMA

El Sporting de veteranos fue más certero de cara a la portería y eso le permitió imponerse a un peligroso Celta en el partido de la Liga Indoor. La puntería de Rubén Blaya, con tres goles en momentos determinantes, permitió que el vigente campeón de Liga se anotara la victoria en su cancha.

Se le temía al Celta, que dirige Moncho Carnero, porque los vigueses en su campo habían goleado al Málaga (9-3) que tantos problemas dio a los rojiblancos en su visita a Gijón (6-4) y lo demostraron sobre la moqueta de El Coto. Las buenas paradas de Ramón a disparos de Ratkoviv impidieron que los gallegos estrenaran el marcador, para luego Rubén Blaya y José Manuel anotar antes del descanso (2-0).

Tras la reanudación Manel acortó distancias, pero Rubén Blaya acertó con las mallas rivales y eso dio lugar a que en otros contragolpes ampliaran Fredi, Rubén Blaya y José Manuel (6-1).

El partido estaba sentenciado pero se confió en exceso el Sporting yendo al ataque y el Celta en dos minutos marcó dos goles.

Pero lo peor es que los rojiblancos pasaban por momentos de desconcierto y nervios porque así perdieron la SuperCopa ante el Real Madrid. Felizmente los técnicos Redondo y Claudio lograron que sus futbolistas frenaran sus impulsos atacantes para pasar a controlar el balón en esos 8 minutos finales. Y ya no pasaron tantos apuros a pesar de que el Celta bien conducido por Quique, en el primer tiempo con la fuerza de Ratkovic, intentaba sin éxito batir a Ramón. Fue un triunfo más sufrido y trabajado de lo que refleja el marcador final, pero se logró una nueva victoria.