Carlos Souto, fichaje de lujo para el Oviedo Tradehi

Carlos Souto ha vuelto a casa. Muy ilusionado, el asturiano fue presentado como nuevo jugador del Oviedo Tradehi Rugby Club para las próximas dos temporadas con opción a una tercera. Y es que sus 35 años considera que tiene cuerda para rato. «Mientras el cuerpo aguante, seguiré en activo, y la verdad es que me encuentro muy bien», comentó Souto.

Cincuenta veces internacional con la selección absoluta, y siete veces con las categorías inferiores, los dirigentes de la entidad no ocultan que se trata de un fichaje «de lujo». Desde 2003, Souto militaba en el Cetransa El Salvador de Valladolid, uno de los mejores equipos del país, con el que ganó 4 ligas, y otras tantas Copas y Supercopas. Aunque deja la División de Honor para competir en División de Honor B, el jugador dijo ayer que sólo va a echar en falta una cosa. Y no es deportiva. «Es la primera vez que no voy a jugar con mi hermano Sergio, porque siempre que se interesaba algún equipo por alguno de nosotros poníamos de condición que debíamos ir los dos».

Su trabajo de Guardia Civil le ha obligado a volver a casa, mientras que Sergio ha seguido en Valladolid, donde se ha casado. A pesar de la distancia, Carlitos, como le llaman sus allegados, afronta motivado la nueva etapa. «Es un nuevo proyecto, pero para nada un paso atrás», aseguró. «Estoy aquí para lo que necesiten, y voy a colaborar con el entrenamiento de la delantera y con la Escuela si me lo piden», aseguró. Para ello, durante los próximos tres años se preparará para sacarse el título de técnico. Acompañaron a Souto durante la presentación el presidente del club, Jaime Martínez; el presidente de Tradehi -principal patrocinador del club-, Moisés Álvarez, quien aseguró que, mientras esté en su mano, «seguiré apoyando al deporte asturiano como llevo haciendo desde hace tantos años, y sobre todo al rugby»; y Jorge Menéndez, concejal ovetense, quien reclamó un mayor apoyo para este deporte. «Las instalaciones del Naranco, donde juegan y entrenan, están en muy mal estado, y el Principado debería implicarse más y adecentárselas».