Paredes (Portugal)

España conquistaba ayer en la localidad portuguesa de Paredes su séptimo Campeonato de Europa consecutivo y el decimosexto de su historia, y por segunda vez lo ha hecho ganando en Portugal al equipo anfitrión, lo que no conseguía desde hacía nada menos que 27 años.

Los números de la Roja rompen todas las estadísticas. España ya suma 55 partidos seguidos ganando, desde 2003. En este período ha conquistado nada menos que siete títulos de Europa y cuatro del mundo de manera consecutiva.

En este equipo español de ensueño también ha tenido su importante parte de protagonismo el asturiano Toni Pérez, que aunque no disputó la final sí lo hizo en los anteriores partidos del campeonato.

Y es que el ovetense, de 22 años y jugador del Liceo de La Coruña, se ha convertido en el primer jugador no catalán que forma parte del combinado español en un torneo internacional oficial en el siglo XXI.

El torneo se disputó por medio de una liguilla y, aunque tanto Portugal como España llegaban al partido final con un pleno de victorias, a los locales les valía con el empate ya que contaban con la diferencia de goles a su favor.

Los lusos se vieron con el título en las manos con el 4-4 logrado de penalti por Ventura, pero el tanto de Bargalló a seis segundos del final prolongaba la racha del mejor equipo de la historia de este deporte.