El Betis acabó con su maleficio en Vallecas dieciséis años después de la última victoria en el coliseo madrileño y se impuso al Rayo con goles del central alemán Heiko Westermann y de Rubén Castro, en un partido marcado por los errores defensivos del conjunto local, que facilitaron enormemente la victoria de los visitantes, de todos modos mucho mejor plantados en el campo que los locales.