Luis Miguel Rincón Fontán, Luismi, (23 años) es un producto de la prestigiosa cantera del Celta de Vigo que recaló este verano en el Avilés y que pronto demostró su clase sobre el campo. El técnico, Pablo Lago le convocó en los 21 partidos disputados y fue titular en 17, los once primeros y los cuatro últimos consecutivos. Metió cuatro goles y Lago le considera un jugador "muy importante" en el equipo.

Luismi está viviendo una experiencia inédita en Avilés puesto que es la primera vez que deja su Vigo natal para jugar al fútbol. "Me decidí a salir porque acabé la carrera de Biología el año pasado y no tenía nada que me retuviera en Vigo", explica. Le gusta sobre todo la genética y su intención es hacer el máster el año que viene, pero está dispuesto a aparcarlo todo para intentar vivir del fútbol. "El lo que queremos todos los que nos dedicamos a esto, pero ya se verá lo que pasa", comentó.

El jugador gallego empezó muy bien la temporada, pero es consciente de que su rendimiento bajó a finales del pasado año, una circunstancia que achaca más a cuestiones mentales que físicas. "Pasé un par de meses difíciles, pero ahora vuelvo a sentirme mejor. Las vacaciones y el estar con la familia siempre viene bien y creo que regresé muy renovado en todas las facetas, al menos pienso que estoy a un nivel bastante bueno", explicó para añadir: "Contra el Tuilla no fue un buen partido en general, pero contra el Mosconia me sentí bien y espero mantener ese nivel y el del principio de la temporada".

Y es que el empate (1-1) contra el Tuilla del pasado domingo supo a poco entre los avilesinos porque, señaló, Luismi, "en casa queremos ganar siempre y perder puntos siempre es negativo", aunque reconoce que el Tuilla es un equipo "competitivo, muy físico e intenso", que mereció el resultado. "En la primera parte estuvieron mejor y tenemos que ponernos las pilas porque nos faltó un poco de intensidad y nos fuimos apagando un poco hasta la segunda parte que quizás apretamos un poco más, pero ellos defendieron bien y nos tenemos que conformar con un punto aunque tenemos que mejorar".

El Avilés es segundo (50 puntos), con un líder Caudal (58) que parece ya inalcanzable y un Langreo (49) que presiona fuerte, pero Luismi recuerda que en el fútbol todo puede pasar. "Cualquier equipo puede tener dos partidos malos y eso se paga, aunque es cierto que el Caudal está muy fuerte y que el Langreo viene apretando mucho, sobre todo ahora con Michu que mejora el nivel individual del equipo, pero nosotros tenemos que ganar todos los partidos que podamos y hacer nuestra liga".

Por el Suárez Puerta tienen que pasar en la segunda vuelta los ocho primeros, excepto el Colunga, y Luismi espera partidos muy complicados. "Serán difíciles para todos porque seguro que a nuestros rivales no les gusta mucho venir a nuestro campo, pero sabemos que serán partidos complicados que tendremos que competir y salir a ganar".

Su posición favorita es la media punta, uno de los puestos con más competencia en el equipo. "A mi me gusta jugar ahí y creo que es donde más puedo rendir porque tengo más llegada y más contacto con el balón, que son mis características; puedo jugar también en banda, pero en muchos partidos ahí es más complicado entrar en juego y yo necesito hacerlo porque me gusta mucho tener el balón", señaló.

La plantilla es un poco corta pero Luismi entiende que "vale más ser pocos y buenos que muchos que no aporten tantas cosas", y defiende que en un par de meses el equipo estará donde quiera estar. "Tenemos una plantilla excelente, con jugadores de mucha calidad y al final depende de nosotros el ganar o no. Yo creo que estaremos muy arriba, no veo al equipo más abajo de los dos o tres primeros puestos".

Y concluyó: "Estoy muy contento en el Avilés porque la afición y todo el entorno del club me trata muy bien, y los compañeros y el cuerpo técnico son magníficos".