El Avilés enlaza la segunda mejor racha de la temporada con cinco victorias seguidas (el récord está en las ocho de la primera vuelta) después del aviso que supuso la derrota en Siero (1-0), y el técnico, Pablo Lago, destaca que el triunfo ante el Praviano (3-0) indica que empezó marzo en la misma línea de seriedad que le llevó a ganar los cuatro partidos de febrero (Caudal, Ceares, Llanes y Colunga).

El técnico destaca la mejoría del equipo en las dos áreas durante el último mes, algo vital, recuerda, en el fútbol. "A los rivales les cuesta hacernos ocasiones porque defendemos con mucha gente y mejor, y a la vez llegamos mucho más al área rival". Y añadió: "El Avilés transmite ahora que es un equipo muy difícil de ganar porque cada vez tiene mayor fluidez, juega mejor y está mucho más junto atrás y arriba".

La situación es muy buena, pero Lago recuerda que siempre hay que cosas que corregir. "La mejora tiene que ser continua, desde la estrategia al trabajo defensivo. Ahora estamos centrados en apretar arriba con más intensidad y más gente para recuperar pronto, como se hizo ante el Praviano".

El objetivo a estas alturas de la temporada, explica, es implicar a todos los jugadores. "En este momento tenemos a mucha gente capacitada para jugar cualquier partido y es muy importante conservar eso cara al final de la temporada". El técnico, no obstante, asegura que no empezó a hacer pruebas cara al play-off, algo, explicó, que queda para las tres o cuatro últimas jornadas. "No pensamos en ello, sobre todo porque quedan 30 puntos en juego y vamos paso a paso, viendo cada semana lo que nos va pidiendo el equipo y lo que tenemos que mejorar para llegar al camino que nos haga muy competitivos a última hora", comentó.

El técnico, en todo caso, quiere ganar cuanto antes los dos partidos que les quedan a los blanquiazules para asegurar su participación en la lucha por el ascenso. "Lo importante es que todos lleguen bien, que estén enchufados y que mantengan la intensidad tanto los que salen en el once como el resto".

Formar el once es un problema para Lago porque toda la plantilla está a un alto nivel. "Ahora tenemos capacidad para decidir quien puede jugar y quien no, que es lo que pedíamos en la primera vuelta, y es difícil hacer un once porque todos están a un grandísimo nivel y en estas condiciones el beneficiado siempre es el equipo porque saben que ese nivel no lo pueden bajar, que hay que mantenerlo para poder jugar", señaló.

El equipo visita el próximo domingo (17.00 horas) al Tineo en el Municipal, y Lago asegura que el equipo está totalmente centrado en ese partido sin pensar en la siguiente visita del Langreo, con el que disputa la segunda posición. "Sólo nos preocupa el Tineo y sabemos que va a ser complicado porque el miércoles juegan el partido aplazado contra el Roces y el campo estará difícil. Habrá que adaptarse y competir otra vez en campos en malas condiciones manteniendo el actual nivel de intensidad", comentó.

Y es que Lago no se fía a pesar de los buenos resultados cosechados en las dos últimas salidas ante el Ceares (1-6) y el Colunga (0-2). "Los partidos se definen por pocas cosas y jugar fuera siempre es complicado, por eso hay que seguir buscando la manera de ser mejores y creo que vamos por buen camino", concluyó.