El CD Lealtad se llevó los tres puntos del Hermanos Antuña de Mieres en un partido con dos caras bien distintas, antes y después del tanto de David Grande.

Antes del único gol del partido, el Caudal se mostró como un equipo paciente en la elaboración y dominador de la posesión y del juego.

A consecuencia de ello llegaron los acercamientos mierenses a la meta de Porrón que tuvieron su culmen con un penalti cometido sobre Annunziata y que él mismo se encargó de lanzar.

El meta maliayo, Javi Porrón adivinó la dirección de su lanzamiento y consiguió repeler el disparo. En el rechace, con todo a su favor, el canario no pudo rematar a puerta vacía ya que un defensor le arrebató la pelota viniendo desde atrás.

La jugada clave del encuentro se produjo en el minuto 26.

Yosu buscó el pase en profundidad sobre David Grande. Un defensor caudalista, con ventaja, se tiró al suelo para despejar la pelota pero acabó dejándola muerta en el área para que el delantero Grande superara a Chechu sin problemas.

A partir de este momento el Lealtad manejó el encuentro con comodidad. Muchos minutos de tarea defensiva y muy pocas ocasiones concedidas.

Solo al final del encuentro un Caudal volcado pareció tener la oportunidad de empatar.

Los de Aguirre no solo se defendían con orden sino que sus esporádicas contras creaban peligro ante la meta de Chechu que tuvo que repeler un remate de Robert con la pierna y que vio como Alberto, a puerta vacía, no era capaz de empujar un claro balón a la red.

Muy serio el quipo de Aguirre que ya acumula siete puntos en solo tres partidos lo que le aúpa al coliderato. Su próximo encuentro será en Les Caleyes frente al Guijuelo.

No lo hizo mal el Caudal pero fue excesivamente romo en ataque ante un equipo siempre bien colocado. En su próximo encuentro se desplazará a tierras pucelanas para enfrentarse al filial del Real Valladolid.