El Marino quiere quitar ante el recién ascendido Llanera el mal sabor de boca que le dejó la derrota en el último minuto ante el Covadonga de la pasada jornada, la primera de la temporada en Miramar, y estrenarse con victoria en el Pepe Quimarán, un campo en el que nunca jugó en Liga.
El técnico, Adolfo Pulgar, tuvo que esperar hasta el final del entrenamiento de ayer para saber los jugadores con los que podía contar. Al final se cayó Pozo, aunque Pevida y Llerandi pasaron la prueba y entraron en la lista. Geni por lesión y Omar Fernández por motivos técnicos completan la lista de ausencias.
Pulgar suele confeccionar el once en función del rival y la novedad esta mañana puede ser la vuelta al once de Oliveros para hacer pareja con Trabanco en el centro de la defensa porque el técnico quiere una defensa corpulenta debido a las dimensiones del campo y a que se prevé un choque de mucho fútbol directo.
La vuelta de Oliveros llevaría a Guaya al lateral izquierdo, Viesca adelantaría la posición en la misma banda y el sacrificado sería Coutado. Y el sustituto de Pozo en el centro del campo será Aitor.
Un posible once es el formado por Davo en la portería; Borja, Trabanco, Oliveros, y Guaya en defensa; Aitor, Pablo Hernández y Pablo Suárez en la línea de tres del centro del campo; Polo en banda derecha; Viesca en la izquierda; y Cárcaba arriba. Completan la lista Marcos, Boris, Llerandi, Pevida y Coutado.
La victoria permitiría a los azulones enganchares a los puestos altos pero el Llanera, que empezó con altas expectativas y que tardó en coger el aire a la nueva categoría, está al alza. Los llanerenses estuvieron ocho de las trece jornadas disputadas en puestos de descenso (cuatro de ellas como colista), pero sacaron siete puntos en los tres últimos partidos que les sacaron del pozo. La presencia de hombres como Aitor Tornavaca, Pablo Álvarez y la reciente incorporación de Miguélez y Dani Sampedro dan al equipo mucha experiencia y calidad.
Pulgar ya advirtió que el rival tiene mucho peligro. "Es un equipo con mucha veteranía y ahora está en buena dinámica, además hay que contar con la dificultad del campo". El técnico, en todo caso, sólo piensa en ganar porque, "perder dos partidos seguidos puede ser muy malo para un equipo que aspira a estar arriba".
Los buenos resultados obtenidos en campos similares como en el Candín con el Tuilla (0-0) y en Posada frente al Urraca (0-2) invitan al optimismo azulón.
En el Llanera milita el defensa Esteban, que jugó en el Marino en la temporada 2005-2006 en Segunda B y repitió con el Langreo en la 2014-2015, en la que descendieron los langreanos.
