Al Oviedo Baloncesto Unión Financiera se le acerca la hora del primer partido del play-off (mañana, 21.00 horas en Pumarín ante el Orense) y, de momento, por ambición no será. Dani Pérez, base titular del equipo, se mostró confiado en poder ganar al equipo gallego en el inicio de un play-off que tiene ilusionada a la ciudad. "Ahora nos falta lo mejor y seguro que el equipo vuelve a dar su mejor nivel", señaló ayer, a modo de motivación, el base catalán en un chat para la versión digital de este periódico (www.lne.es).

"La verdad es que creo que nadie se lo podía imaginar a principio de temporada. Aunque sí que esperaba que el equipo hiciera un buen año", señaló Pérez, que aseguró que ve al equipo "con muchas ganas de empezar el play-off" y que "aunque sabemos que será muy complicado, tenemos ganas de hacerlo bien porque la afición nos llevará en volandas".

Pérez se deshizo en elogios hacia el Oviedo Baloncesto, un club "muy familiar" en el que recaló el verano pasado procedente del Quesos Cerrato Palencia, equipo con el que se proclamó campeón de LEB Oro. Aunque hubo insistentes preguntas, el base no quiso concretar su futuro. "Ahora mismo hay que acabar la temporada lo mejor posible, y en verano ya se verá. En Oviedo se está muy bien, la verdad", comentó.

Pérez, que señaló a Miquel Salvo como el compañero "más gracioso" en el vestuario, aseguró que el equipo intentará que esta vez sea la "definitiva" para conseguir el ascenso, aunque matizó que "será muy difícil" y que el equipo luchará por ello. El base catalán afronta con motivación extra el duelo porque se perdió la Copa por lesión. "Es un reto muy bonito", insistió Pérez. El equipo se reunió ayer a comer en una especie de conjura antes de la batalla en Pumarín.